ᴅᴏɴ'ᴛ ᴋɴᴏᴡ ʏᴏᴜ ¡! ᴡᴏɴʜᴇᴏɴ ғʀᴏᴍ ᴍᴏɴsᴛᴀ x

O14; ᴄᴀʀᴇʟᴇss

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La fiesta estaba yendo bien, demasiado aburrida a gusto de MinJi. Su madre la había obligado a conversar con los hijos de varios políticos, ricos, duques y cualquier cosa que se moviera. Algunos debía admitir que eran guapos pero no le interesaban del todo. Ellos elogiaban su físico, más que nada por el obvio escote que llevaba y eso la hacía no tomarlos para nada en serio. Algunos le decían lo bonita y encantadora que era, sobre todo por sus mejillas regordetas y sus pequeños ojos. Otros tantos le decían que querían verla más seguido, que querían conocerla mejor y simplemente fingía aceptar.

Su madre fue a presentarle a un chico de Gales bien acomodado, no tuvo de otra más que hablar con él y seguirle la conversación. HoSeok la cuidaba desde donde estaba, su conversación más larga fue con la reina y estaba nervioso, no era mala mujer pero era imponente. Ella le había había preguntado sobre las clases de MinJi y otros aspectos de Bath que junto al rey intentaron minimizar. Hubo un momento en el que la reina pidió hablar con MinJi y la menor apareció a un lado de sus padres, haciendo una reverencia con una sonrisa encantadora.

La reina elogió su aspecto y su bello carisma, también el cómo había crecido y lo educada que era, cosa que alimentó el ego de la pelirroja. Mientras conversaba con la reina, HoSeok se sintió mejor al tenerla cerca. Le rodeó la cintura con uno de sus brazos y la acarició suavemente, MinJi se entorpeció un poco por aquello pero recuperó su ritmo un segundo después. Abrazó a su padre dejando un mano sobre su pecho y sonriendo hacia la reina.

—Pero ya sabe, Cedric es bueno en todo lo que hace. Me ha enseñado muy bien sobre Corea y ha cuidado bien de mí.

—Me alegra escuchar que la has pasado bien, Blair. Espero que sigas siendo tan brillante como siempre, disfruta de tu cumpleaños.

La reina le sonrió y se fue con pasos lentos hacia una mesa para conversar con otros familiares, siendo seguida de su esposo. MinJi se colocó delante de su padre y le sonrió de lado, estaba ansiosa por bailar un poco, era animada y necesitaba gastar su energía aunque fuera repetitivo. Igual, tampoco tuvo que esperar mucho, pronto una pieza musical hizo presencia en el enorme salón gracias a la banda sonora que habían contratado.

Todos abrieron paso en el salón dejando un pista de baile en el centro, miraban hacia MinJi y Cedric esperando que hicieran la tradición del vals con la celebrada. MinJi le pellizcó la mano para reaccionara y sólo así, HoSeok tomó su mano y la llevó a la pista. No se consideraba un buen bailarín y tener que ser el centro de atención por un rato le ponía nervioso. Ni siquiera recordaba tener que hacer eso.

HoSeok rodeó la cintura de la menor con uno de sus brazos, ella colocó una mano sobre su hombro y sus manos libres las entrelazaron suavemente. MinJi le sonrió y se pegó de forma decente al mayor, había una diferencia de estaturas adorable pero no demasiada. Algunos comenzaron a aplaudir y HoSeok sintió que iba a caerse, ni siquiera el día de su boda se había sentido listo para bailar con Audrey.

Comenzaron a danzar suavemente sobre el piso pulcro de mármol, podía sentir lo delgado y perfecto del cuerpo de MinJi entre sus dedos. Audrey veía desde lejos con una sonrisa de orgullo y felicidad. Las pecas de MinJi parecían más rojas pero no estaba avergonzada, de hecho, se sentía feliz y animada por lo repentino que fue, seguro a pedido de su madre mientras los veía conversando. Se sentía bien y alzó la mirada para ver al mayor, quien igual la veía, se sonrieron mutuamente y se separaron sólo un poco para dar una vuelta grácil a la pelirroja para lucir su vestido el cual se alzó por la ráfaga de aire, un segundo después de terminar la vuelta, HoSeok la atrajo a su cuerpo pegándola fuertemente y logrando que soltara un muy silencioso jadeo. Se volvieron a mirar y querían reír por lo tonto de la situación pero sus rostros estaban cerca, tal vez demasiado para el ojo público; y aunque hubieran muerto por besarse en ese momento, desearon hacerlo.

Al terminar el baile, recibieron aplausos y ellos rieron por fin. Se alejaron de la pista y salieron del salón por unos segundos y fueron a un pasillo en el que HoSeok pegó a MinJi a la pared, sin esperar más para darse un beso fogoso y necesitado de forma brusca. La menor lo tomó de las mejillas para pegarle más y no pudo evitar jadear por los húmedos sonidos que salían de ambos labios. HoSeok apretaba la cintura de la menor con verdadera fuerza pero no pudo evitar pasear su mano por su cuerpo, incluso acariciando sus senos suavemente pero terminando por sostener una de las piernas de la pelirroja con su mano debajo del frondoso vestido que llevaba, levantándolo un poco por la altura a la que estaba su pierna, justo en la cadera del mayor. MinJi gemía sobre sus labios sin preocupaciones pero pronto tendría una, se habían escuchado algunos golpes de tacones contra el suelo pero se detuvieron, por lo que siguieron sin tomarle importancia.

Pero se escuchó ahora un carraspeo que por fin les hizo apartarse de sus labios y mirar hacia la persona, pensando que sería un sirviente pero ambos saltaron y se alejaron, MinJi empujó al mayor y así aquella persona que había aparecido, comenzó a reír.

—No es lo que tú crees.

—Bueno, ¿entonces MinJi se había desmayado y tratabas de devolverle la conciencia o...?

—Por favor, no digas nada.

—Ya sé que no debo decir nada pero deberían ser discretos, ¿qué tal si hubiera sido Audrey? Comerse en los pasillos no es muy inteligente pero comprendo, podía notar la tensión en ese vals.

—Dior...

—No es nada nuevo para mí, incluso podía suponer lo que pasaba. HoSeok no es muy discreto y desde siempre he podido notar esa inclinación tan enferma que tiene por este tipo de relaciones. Lo viví un poco entonces no pasa nada.

—¿Qué?

—Sólo iba camino al jardín, hay cinco chicos que quieren algo conmigo y me estaban aturdiendo. Prometo no decir nada pero tengan más cuidado.

La castaña comenzó a caminar hacia HoSeok, quien estaba aturdido y avergonzado, Dior se acercó a su oído y susurró.

—Deberías tener más cuidado con ella que conmigo. Audrey no es una tonta, si sigues así, ella se dará cuenta. ¿Por qué ese extraño gusto? Tú y papá son iguales... Asegúrate de no arruinarle la vida, si sucede algo de lo que te puedas arrepentir, poco me va a importar que seas mi tío.

Terminó y se alejó para sonreírle suavemente a MinJi, quien estaba avergonzada y demasiado sonrojada.

—Me quedaré a dormir hoy, por lo que podemos conversar después del evento.

Así, Dior se fue siguiendo recto por el pasillo. Ambos amantes la miraron irse hasta que desapareció al dar la vuelta. HoSeok tragó en seco y volteó a ver a MinJi, quien habló primero.

—¿A qué se refiere con que 'Lo vivió'?