Inesperado.

44.

Narra Hugo.

Me empecé a estirar y abrir de a poco los ojos, la noche había sido un puto espectáculo, no podría haber tenido mejor festejo de lanzamiento. La estaba abrazando a Eva por atrás así que me di vuelta para buscar mi móvil y ver qué hora eran, iban hacer las 14hs y dudaba que Eva se levante ya que nos habíamos ido a dormir a las 8 de la mañana con nuestro festejo. Le di un beso en el cuello haber si reaccionaba, llevaba una remera mía así que metí mi mano por abajo de esta para acariciarla.

Eva: no logro moverme.- solté una risita y ella se dio vuelta para apoyarse en mi pecho.- que festejo el de anoche, tengo la voz echa percha.- era verdad, se la escuchaba media afónica.

Hugo: es que hizo mucho frío ayer amor, pero hoy nos quedamos todo el día en la cama con calor.- ella me miro a los ojos haber con qué intención se la decía y nos reímos.- y si, fue estupenda la fiesta de anoche.

Nos quedamos un rato acostado mirando todas las noticias de anoche que habían salido y los portales. Cada uno estaba con su cel viendo las redes, habia miles de cosas subidas y nos reímos de algunos comentarios locos de mis fans. Nuestro video de secretos estaba por todos lados y eso como un regalo para nuestras fans, estaban sacadisimas.

Hugo: escucha, son las 14 y algo y Hugo todavía no dio señales de vida, eso quiere decir que tuvo un post festejo fuerte.- soltamos una carcajada.- y si que lo tuve eh, no puedo ni quejarme.- ella me miro negando mordiendose el labio.

Eva: están locos porque tengas entrevistas y les cuentes cómo compusiste Soy yo.

Hugo: yo voy a contar la verdad eh.- ella negó y dejo su móvil para abrazarme fuerte.

Eva: ya pensaste que vas hacer para tu cumple, estamos a sábado 5 de dic, te quedan dos semanas.

Hugo: pasar el día contigo y fiesta.- dije mientras acariciaba su espalda. Y así nos quedamos todo el día sin movernos de la cama, comimos, nos duchamos pero volvimos a la cama el día de ayer nos había dejado mal.

A eso de las 4 de la mañana me levanto y no puedo conseguir seguir durmiendo, me doy vuelta y abrazo a Eva, ahora estamos frente a frente y me quedo mirándola sin moverme para no despertarla. A los minutos empecé a cerrar mis ojos haber si lograba dormirme, siento como ella se da vuelta y queda boca arriba. Empiezo a dormirme y no sé cuántos minutos pasaron pero siento como empieza hablar y moverse.

Eva: no no por favor no.- abrí mis ojos y me di cuenta que estaba teniendo una pesadilla.

Hugo: Eva.- le empece hablar sin tocarla haber si reaccionaba. Veo cómo lleva sus manos a su cuello y empieza como a ahorcarse ella misma.- mierda Eva, qué haces, saca tus manos.- le grite y me empecé a desesperar. Ella negaba y sus lagrimas caían, con mis manos intentaba separar las de ellas pero estaba haciendo demasiada fuerza.- mierda Eva, qué reacciones.- le gritaba mientras trataba de sacar las manos, creo que le hice un poco de daño pero pude sacarlas que era lo importante. Ella abrió los ojos y empezó a llorar más fuerte, yo empecé acariciar su espalda esperando a que reaccione del todo, iba a hablarle cuando empezó a toser y como que le faltaba el aire.

Eva: me ahogo Hugo, me ahogo.- me dijo desesperada tocándose el pecho. Me puse rápido a delante de ella y agarré su cara con mis manos.

Hugo: joder eva, respira, tranquilízate.- ella trataba de seguirme pero cada vez le faltaba más el aire. Corrí en un Segundo a abrir la ventana del balcón, aunque hacia demasiado frío tenía que hacerlo para que entre aire y volví a ella. Nos sentamos en el piso y ella apoyó su espalda en la cama.- mierda Eva que respires.- le grite y ella empezó a seguirme de nuevo, poco a poco iba calmando.- eso amor, sigue así.- teníamos nuestras miradas conectadas, ella siguió por unos minutos más y volvió a la normalidad.- joder Eva.- le dije y la atraje hacia mi y nos abrazamos fuerte.

Estábamos conectados pensé, si yo no me hubiera levantado capas no llegaba a ayudarla a tiempo. Nunca había vivido una situación así, me había desesperado demasiado. Por suerte lo supimos controlar y ya estaba bien, la amaba demasiado y no quería imaginarme lo mal que podría haber terminado eso.