let me love you; choni

Capítulo 28

―Hey, Doc.― dijo Toni cuando abrió la puerta.― Ven entra, Cheryl está en la cocina.― Dio un paso atrás para dejar pasar a Heather.― ¿Puede hacer más frío ahí afuera?

―Espero que eso no signifique que vamos a tener un invierno horrible.― dijo Heather sacándose la chaqueta y colgándola en el perchero junto a la puerta.― Vas a tener que cambiarte esa chaqueta tuya por otra algo más abrigada.

―¿Sabes lo que cuesta una buena chaqueta?― dijo Toni acercándose.― Hazme un favor ¿Quieres?― susurró.― No le digas nada de eso a Cheryl.

―Y ¿Por cuánto tiempo crees que Cheryl te va a dejar salir allí fuera con esa cosa tan fina?― preguntó Heather con el mismo tono bajo de voz.

―Con suerte, dos semanas más. No voy a tener dinero extra hasta entonces.

―Hey, ¿De qué están hablando ustedes dos ahí?― gritó Cheryl desde la cocina.

―No te preocupes, no voy a contarle tus secretos.― dijo Heather.― Además creo que ya sabe todas las malas costumbres que tienes.

―Sobre eso.― dijo Cheryl moviéndose por la puerta que separaba la cocina y el salón.― Quién sabe, puede que algún día ella me quite una o dos. Los milagros ocurren.

―¿Quieres decir que algún día me pararé y encontraré una pelusilla de polvo bajo el sofá?― preguntó Heather.

―Bueno, no presiones tanto.― dijo Cheryl poniendo sus brazos sobre sus caderas.― Pero me he convencido que no es un crimen dejar la ropa sin doblar después de habérmela quitado.

Heather miró de Cheryl a Toni.

―Estás bromeando.

―Nop.― contestó Toni orgullosa.

―Me pilló en un momento de debilidad.― añadió Cheryl en su defensa.

―Debe de haber sido "EL" momento.― dijo Heather golpeando a Toni en el hombro.― Ahora intenta llevártela a la cama dejando un plato sucio.

―Nunca ha pasado.― dijo Cheryl confidencialmente.

Heather alzó su dedo índice.― Lo has olvidado ¿no?

Cheryl le ofreció una confusa mirada por unos instantes antes de que su memoria recordara.

―Oh.

―Como dije, te levantaste en mitad de la noche y los lavaste, pero aún así lo consideré una victoria.― dijo Heather, su postura cómoda y relajada sin que su cuerpo se agitara por las emociones que Toni había visto al final de su última sesión con la terapeuta. Había preguntado, pero Cheryl había dicho muy poco de la conversación que tuvo con Heather, solo que pensaba que había ido bien. Si el cambio de Heather era alguna indicación, su encuentro había sido un éxito total, como podía ver Toni. Todavía había preguntas que debían ser contestadas antes de que se convenciera totalmente de que las cosas estaban completamente bien entre las tres.

―Hey Doc, voy a fumarme un cigarrillo antes de que lleguen los chicos. ¿Vienes a hacerme compañía?,― dijo Toni mientras deslizaba la puerta corrediza esperando por un respuesta. Como había supuesto, Heather la siguió fuera a la terraza cerrando la puerta detrás de ella.

―¿Sí?― preguntó Heather expectante.

Toni sacó los cigarrillos del bolsillo y encendió uno.

―Así que.― dijo moviéndose para que el humos flotara lejos de donde estaba Heather ― ¿Todavía tendremos nuestras sesiones regulares?

―Por supuesto.― contestó Heather.