let me love you; choni

Capítulo 30 (Final)

―¿Amor, estás segura que éste es de la clase que no pierde las agujas?― preguntó Cheryl mientras cargaban el enorme árbol para meterlo en casa.

―¿Cómo puedo saberlo?― dijo Toni.― Espera, vamos a acomodarlo aquí.

―¿Estás segura de que esa base es suficientemente grande?. No quiero que sobresalga.

―No va a sobresalir y la base es lo suficientemente grande.― dijo Toni mientras se movia hacia la esquina destinada al Árbol de Navidad.― Amor ¿Cuánto tiempo tenemos hasta que tengamos que salir hacia el aeropuerto?.

―El avión de tía Helen llegará por la noche.― dijo Cheryl.― Y estás por golpearte con la pared.

―Lo sé, aguanta, voy a ponerlo sobre la base, sujétalo mientras te vas acercando y levantándolo. Entonces lo sujetaré con los tornillos y estará listo,― dijo Toni mientras se agachaba.― ¿Crees que podemos decorar ésta cosa en las próximas dos horas?

―Eso espero cariño, de otro modo vamos a obtener la ayuda no solicitada de tía Helen.― dijo Cheryl.― ¿Estás bien ahí abajo?

―Sí, solo intenta ir acercándote despacio.― dijo Toni.― Todavía digo que las luces tienen que ser intermitentes. De otro modo, ¿Por qué molestarse en ponerlas?

―Luces multicolores parpadeando.― dijo Cheryl desaprobadoramente.― ¿Por qué no ponemos un Santa y un muñeco de nieve luminosos en el césped?―Agregó sarcasticamente.

―Me gustan los santa luminosos.― dijo Toni.

―Son comerciales y feos.― dijo Cheryl.

―Es Navidad, amargada.― dijo Toni mientras se apartaba de debajo del árbol y se plantaba.― Suéltalo.― Se quedó allí de pie pasando el brazo alrededor de la cintura de Cheryl.― Nuestro primer árbol de Navidad, amor.

―Es más grande de lo que parecía en la tienda.― dijo Cheryl.

―¿Es ese "más grande" bueno o malo?― preguntó Toni.― Dijiste que podía elegirlo y pensé que éste tamaño estaría bien.

―Es un buen tamaño amor.― dijo Cheryl de forma tranquilizadora.― Solo que no sé si tendremos suficientes adornos para cubrirlo. Mi madre solo me dio un par de cajas de adornos y luces.

―No puedo creer que nunca antes te molestaras en poner un árbol de Navidad.― dijo Toni descansando su cabeza sobre la parte superior del pecho de Cheryl.

―Cuando era como Jess pasábamos los días de una casa en otra. No tenía sentido preocuparse en poner un árbol en una casa donde posiblemente no estaríamos.―Cheryl dio un paso atrás y abrió una de las cajas que había encima de la mesita de café.― Y, por supuesto, nosotras no vamos a estar la mayor parte del día aquí.― miro el árbol.― ¿Cómo se puede saber si es el tipo de árbol que pierde las agujas?

―¿Cuando un montón de ellas estén sobre la alfombra.?― dijo Toni.― No lo sé, llama a alguien y pregúntale.

―Kevin lo sabrá.― dijo Cheryl.― Espera a ver lo que hace en Navidad.

―Michael dijo que se podría ver su casa desde el espacio.― dijo Toni mientras tomaba un cordón de luces.―¿Cuántos tienes de éstos?

Cheryl miró la caja.

―Hay dos más como ese en la caja y otro con bombillas blancas grandes. En la otra caja están las cintas y el resto de adornos.

―Necesitamos más luces.― dijo Toni convencida mientras colocaba una tira de luces entre las ramas más bajas.― Tal vez podamos ir a comprarlas después de recoger a Helen.― dijo esperanzada. Cheryl le ofreció esa mirada indulgente que significaba que ella ganaba.― Estupendo, prometo no pasarme.