Luna es una chica de clase casi baja. Pero el hecho de que no se puedan permitir comprarse regalos en navidad, no es el mayor de sus problemas, tiene cosas más importantes con las cuales lidiar, como su padre en la guerra o repentinos sentimientos h...
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Omnisciente
Las gemelas bajaron las escaleras con sus pequeñas maletas en mano y enormes sonrisas en sus rostros. Dejaron las maletas al pie de las escaleras y se dirigieron al comedor
—¿Se puede saber, porque exactamente van a Charlottetown? —les pregunto Andromeda mientras desayunaban
—Solamente vamos para que Anne le envíe una carta al verdadero amor de Luna —dramatizó Sol
Luna le dio una patada a Sol
—¿Que? —preguntaron las cuatro mujeres
—Está delirando ¡es Sol! —dijo Luna—, es lo que ella hace
—Ay, vamos Luna —le dijo Aurora—. Somos puras mujeres, no te vamos a celar, preocúpate cuando tu papá regrese y se entere —le dijo mientras soltaba una risita—. ¿Entonces quien es? —le pregunto mientras se recargaba en la mesa
La chica no respondió
—Esperen —dijo Cassiopeia—. ¿Quien es el único chico que tanto Luna como Anne conocen y que no esta en Avonlea?
Hannah, Aurora, Cassie y Andy compartieron miradas sorprendidas y vieron a Luna. Al no recibir respuesta de esta, vieron a Sol que asentía con una sonrisa
—¡No puede ser! ¡Te gusta Gilbert! —dijo Aurora—. Tu padre me debe un dólar
—Así que...Gilbert —digo Andromeda mientras subía y bajaba las cejas pícaramente
—Okey, ¿acaso escuchó caballo? Creo que ya llegaron por nosotras —dijo Luna levantándose
—Adiós mamá —dijeron las dos gemelas mientras le daban un beso en cada mejilla a la mujer—. Adiós Hannah —dijeron mientras repetían la acción—. Adiós inútiles —dijeron mientras se despedían con la mano
Tomaron sus cosas mientras las otras cuatro mujeres salían para saludar a los Barry
—¡Anne, Diana! —gritaron las gemelas mientras corrían para reunirse con sus amigas
—¡Luna, Sol! —gritaron las otras dos
Finalmente, se abrazaron mientras reían.
Subieron al carruaje y emprendieron el camino hacia la estación de trenes
—Estoy aburrida. ¿Cuando llegaremos? —se quejó Minnie May que iba en las piernas de su madre mientras Diana iba en medio de sus dos padres
