- No quiero que te vayas. - me dijo triste.
Yo tampoco quiero irme.
- ¿Por qué no?
- Porque me gusta pasar tiempo con vos.
Te amo tanto Mateo.
- Por favor... - me dijo haciendo puchero.
Qué hermoso sos hijo de puta.
Se acercó de nuevo a mí y me sentí incapaz de rechazarlo.
- ¿Te venís a mi casa? - le dije y después me di cuenta de que había sonado un poco atravido de mi parte.
Te va a rechazar por estúpida.
Me miró por unos segundos y luego asintió.
- Tengo el coche aparcado ahí.
Entonces me tomó de la mano hasta el lugar que le había señalado.
Se siente tan bien estar cerca de él.
- No sos muy joven para conducir?
- No es la única cosa ilegal que hago. - le dije y nos reímos a la vez.
Antes de entrar en mi coche me agarró por la cintura y me dio la vuelta plantándome un pico.
Ni te imaginas el pete que te voy a hacer cuando lleguemos a mi casa mijo.
Llegamos a casa y me encontré con el pelotudo de Santiago en mi puerta.
Vete a mamarla un rato.
Santiago es el tipo al que me cogí el otro día. Sí, al que llamé Mateo.
Vaya situación de mierda en la que te has metido Valentina.
Al verme me sonrió apenado.
- Hola, lo siento por lo del otro día. - me dijo rascándose la nuca.
¿No tendría que ser yo la que se arrepiente?
Miró a Mateo con cara de orto y luego me miró a mí de vuelta. Mateo no entendía de quien se trataba.
- ¿Qué queres? - le dije cortante.
- He venido para disculparme por haberme ido, pero veo que ya estás con otro.
Santiago es un buen pibe, aunque nunca hemos llegado a ser más que un garche.
No me interesa en lo más mínimo, aunque parece que a él no le importa que lo trate como una mierda.
- Ese no es tu problema. - le dije intentando mantener la calma. - Por favor vete.
Y entonces recordé algo fundamental, la foto de Mateo y su remera que estaban en mi cuarto.
¿De verdad tenía que decirle que se fuera?
Iba a quedar como una forra. Normalmente esto no me importaría, pero si se trata de Mateo sí.
Me acerqué a él y me miró triste.
- ¿Podemos dejarlo para otra vez? - le susurré al oído y el asintió.
Quise darle un pico, pero me dio un beso en la mejilla y se fue.
Santiago nos miró asqueado. Tenes celos porque no sos como él.
- ¿Podes largarte de mi puta puerta?
- Quiero hablar con vos.
- ¿Sobre qué?
Ya me estás inflando la concha hijo de puta.
- Sobre nosotros.
¿Nosotros? No me hagas reír.
- No hay un nosotros. - le dije fría.
- ¿Quién es él?
- ¿Qué te importa? -bufé.
Se dio la vuelta para irse y por fin pude entrar en mi casa.
Rápidamente fui a mi cuarto y agarré todo lo que tenía de Mateo para esconderlo en un cajón oculto del cual nadie sabía.
Obvio que nadie lo sabe si es que no tenes amigos pelotuda.
También es cierto, aunque no los necesito.
Ahora que Mateo decidió quedarse conmigo ya no sé cual es su horario.
¿Se habrá ido a su casa?
Mientras me estaba preparando un café vi que Nicki subió una foto con él.
Me salió un poco resentido el niño.
Me vestí rápidamente y me dirigí al parque en el que se encontraban.
Conozco perfectamente ese sitio.
Ahora tengo otra persona que tendré que tachar de mi lista.
Pensé que con Gala fue suficiente...
Holiiiis amigos de mi wattpad 🙋🏽🙋🏽
¿Cómo están? A mí me faltan veinte minutos para irme a mi casa. (sé que les vale verga JAJAJA)
Gracias por leer ❤❤❤
La reacción de la people al ver que el título es medio clickbait : 😖😧😩😞
Soy una forra 😂😂
