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Las luces alrededor de la pequeña Kim la sofocaban de poco en poco.

Son contar que sus alrededores un montón de chicos la miraban con preocupación, después de haberse desvanecido así nada más en el pasillo de las duchas, Jin se había asegurado de cargar la y llevarla a su espacio de escuadra donde de encontraban los demás.

Un pequeño algodón con un chorrito de alcohol y guala.

Escuchaba a las voces a su alrededor, pero no entendía nada, todo en poco de nublaba, las acciones de los demás eran borrosas, como esas veces que estas grabado y te mueves muy rápido y todo lo que capta la cámara es solo distorsión.

Sintió de nuevo las manos en sus caras internas de sus piernas y unos fuertes brazos cargando la de nuevo.

Sintió ahora bajo de si un frío enorme que le erizo la piel, era una camilla, sintió como le sacaban la camisa y le bajaban un poco la falda.

Cuando sintio un pinchazo en su brazo reaccionó un poco ya que después de eso sintió algo frío recorrer le las venas.

Con forme pasaban los minutos sintió más alivio y tuvo mejor visibilidad de los hechos que sucedían a su alrededor.

Miro a Jin que su semblante era de preocupación, a los pocos segundos miro a su padre entrar y quedarse en la puerta sostebiendose del marco al ver a su pequeña con dos vías.

Dos, ella ni siquiera se percató cuando le pusieron la otra.

-¿Esta bien doctor?

Pregunto el padre al de bata blanca.

El médico suspiro.

-A estado sometida bajo mucho estrés, no duerme bien, tiene la presión alta en donde es baja y baja donde va alta, si sigue en ese paso la hipertensión la comerá viva, le recomendo mucho reposo si es posible absoluto. Le recomendo señorita.

Dijo mirando a la castaña.

-No llevarse ningún tipo de sorpresa.

Miro a los mayores.

-No durará mucho, pero si aguantará a la final, se lo terca que eres TN, en cuando se acabe la competencia por favor reposo absoluto por favor.

Tomó su maletín y se dirigió a la puerta con una enorme sonrisa.

-Suerte TN.

Estaba apuntó de cruzar la puerta cuando la chica lo llamó.

-Doctor.... Mmmm.... Me puede quitar la vía.

Dijo casi como queja.

El chico solo rascó su nuca y luego hizo chasquido con su lengua a la vez que con los dedos.

-Cierto, voy.

Para cuando se encontraban en las gradas esperando su turno, el brazo de Jin la sostenía fuertemente de la cintura mientras respiraba su aroma para relajarse y que el enojo disminuyera.

-Te debo una explicación.

Susurró en el oído del chico quien tenía su cabeza escondida en su cuello, solo soltó un pequeño quejido.

-No tienes que hacerlo, yo no soy....

Dijo con la voz ronca pero la chica lo detuvo.

-Claro que te la debo, Jin eres en una de las únicas tres personas a las que más amo. Y tengo confianza.

Suspiro aquel chico en su fina piel.

El Tio MYGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora