El Tio MYG

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No todo es como lo dibujan o lo narran en una historia de amor de cualquier libro viejo, o tus padres lo cuentan en hermosas historias de amor las noches para intentar hacerte dormir, esto es muy distinto y ella lo estaba comprobando.

Aquélla fiesta si se le podría llamar así, era en un lugar enorme, gente regada por aquí y por allá. Solo faltaba ver al presidente del país ahí mismo, ya que habían empresarios, locutores, cantantes, ex cantantes, bailarines, actores y demás. Y como no, si ambos en sus tiempos hicieron Buenos amigos en lo que fueron Idos, su amigos decían que la banda, «Bang tang boys» fue legendaria. Conciertos en todo el mundo, cada continente, cada país, cada Estado, cada cuidad.

¿Quiza así conoció a mi madre? -pensó la pequeña Kim en su mente.

Le jodia admitir que le estaba dando en el coño esta maldita mierda. Estaba totalmente abrumada con tantas personas a su alrededor se sentía desfallecer, pero un chico tomaba fuertemente su mano por debajo del mantel de la mesa en el sofisticado lugar. Las piernas le temblaban al igual que las manos, sudaba frío en su frente, quería desmallarse, caer rendida y no recordar más, pero al ver a su tío en el centro de la pista con aquella chica, hizo que todo pensamiento cabal, desapareciera instantáneamente de su cabeza. Para cuando todo el micrófono su corazón se había detenido, su pulso era todo un dilema y la respiración era demasiado cortada.

Entendió en ese momento que debió fingir una enfermedad y quedarse en casa, recostada en su comoda cama con la protectora mano de Jin en las suyas, un gran pomo de helado en su regazo y galletas con chispas de chocolate en el piso esperando el turno de se devoradas.

Pero no podía hacerle eso a su padre, sabía que estaba tan jodidamente emocionado por ir a la fiesta de compromiso de uno de sus mejores amigos, pero el no sabía que ese mismo chico al cual consideraba a un hermano fue la razón por la cual su princesa estubiera tan mal y jodida.

Seguramente si la pequeña Kim decía e insistia en decir que se sentía mal, el de quedaría a cuidar, ella no deciaba que el no asistiera a uno de los pocos eventos más importantes de su vida.

Así que sin más decidió asistir.

El pequeño vestido negro corto y pegado lucia perfecto con su hermosa figura delgada pero con unas cuervas que solo resaltaban más su perfección.

Para cuando las luces se fijaron en Yoongi, ella sostenía con ganas la mano de Jin quien se mantuvo firme al no soltarla por debajo de aquella enorme mesa.

En el momento que su voz ronca resonó en la estancia fue motivo de todas las miradas y murmullos con aplausos fundidos, una capa de sudor atravesó su frente, deseando no haber ido o estar en cualquier otro lugar menos aquel enorme casino, si se le podía llamar así.

-Buena noche para todos, gracias por asistir amigos y familiares. No saben como agradecemos mi prometida y yo su presencia en este momento tan feliz para nosotros, esperamos poder contagiar nuestra felicidad.

Todos cuando acabo aplaudieron mientras le gritaban una que otra cosa. La que más doto fue, «Quién ubiese imaginado que encontró a una mujer tan bella».

-Pero bueno, quiero agradecer enfrente de todos a mis mejores amigo y hermanos, que me acompañaron en los caminos más difíciles de mi vida.
Por favor, Namjoon, SeokJin, Jimin, Jungkook, Hoseok y obviamente Taehyung. Gracias por todos estos maravillosos años juntos como familia. No saben que tan agradecido me siento mi familia.

Abrazo a cada uno de ellos hasta que volvió a tomar al micrófono.

-Esto es una fiesta, hay que gozar al máximo, que mejor manera que con la hermosa voz de mi presiosa sobrina Tn.