Eithan el playboy.[+18]

Daira /¿ Amigos o enemigos ?

- Sabes perfectamente que no son para ti, Daira - contesté mirándola fijamente.

- Solo jugaba contigo - respondió al sentirse presionada por mi mirada. 

- Claro - dije con tono burlón - sé lo que quieres, pero también sé que tu sabes que yo no te lo puedo dar. Mereces algo mejor. - continué ahora serio.

- ¿ Vamos a tomar algo o no ? - preguntó escaqueándose. 

Caminamos durante un rato hasta llegar a una cafetería. 

- ¿ Qué ? - pregunté al verla sorprendida 

- Pensaba que ..... - dijo pero se paró evitando continuar.

- ¿Pensabas que te llevaría a un bar y te dejaría emborracharte ? - pregunté riendo.

Me miró avergonzada. 

Ambos entramos sin decir ni una sola palabra más.

- ¡ Buenos días ! - dijo sonriendo la chica que se acercó para preguntarnos lo que tomaríamos. La estudié rápidamente de pies a cabeza. Castaña, piernas normales, pechos un poco más grandes y caderas un poco anchas. ( Nada mal, me dije a mí mismo ) 

- Querríamos un café y un zumo de naranja, cada uno acompañado por un croissant. - respondí antes de que Daira abriera la boca. 

- ¿ Algo más ? - volvió a preguntar la chica. 

- Nada más - respondí y se fue. 

Hubo un silencio incomodo hasta que la chica nos trajo nuestro pedido. 

- Daira - dije mirándola atentamente. 

- Cállate Eithan, tu no sabes lo que yo quiero. - soltó con odio mientras me miraba fijamente a los ojos.

- Daira, yo no puedo estar contigo, yo no puedo estar con una sola chica y además yo nunca estoy con una chica sino que simplemente me divierto con ella. 

- Ya lo sé - gritó, haciendo así que todos los 'presentes nos miraran. 

- Lo siento, continúen - dije

- Ya lo sé- repitió esta, esta vez más bajo. - pero yo quiero divertirme contigo - continuo.

-Daira, no puedo hacer esto, no contigo - dije - no eres tú. Tú eres una chica estupenda que tiene todo lo que un hombre podría desear, pero yo soy distinto, yo no quiero una familia, no quiero casarme por lo tanto, yo no te haría feliz. Además no puedo divertirme contigo porque lo prometí, prometí que no te tocaría...

- A Dylan - contestó esta mientras agitaba el vaso de un lado a otro - Porque Dylan no quiere que me toques - continuo 

- Se lo prometí a Dylan - respondí rápidamente - pero antes de prometérselo a él, me lo prometí a mí mismo y yo soy un hombre que cumple con sus promesas. 

- Estúpido Dylan - dijo muy bajo intentando que yo no lo escuchara 

- No es culpa suya - dije finalmente - mira Daira - dije enfadado - no es la promesa que hice a Dylan o la que me hice a mi mismo lo que no me deja estar contigo sino que yo no quiero estar contigo. No quiero que me veas como el príncipe azul que no soy, yo solo quiero a las mujeres por una razón, la diversión. A mi me encantan las mujeres y no quiero estar con una sola, por lo tanto no quiero estar contigo ni con otra sino que quiero estar con muchas a la vez. Quiero que veas la verdad, yo no soy ningún príncipe azul ni ningún marido perfecto y no quiero serlo. 

- Vale - dijo enfadada y se levantó para irse pero no la dejé. Tiré un billete de 20 euros sobre la mesa y salí junto a ella. 

- Vamos - dije serio - te llevaré a casa - continué