Ella.

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Después de lo que debería de haber sido un bonito desayuno, que en realidad no fue porque la madre de Carina desayunó con nosotros y se paso los tres cuartos de hora que estuvimos sentados hablando sobre lo impertinente que ambos habíamos sido con ella y nos dijo que dormir en la misma cama era inaceptable en su época. ¿ De que siglo es ? pregunta mi subconsciente. Una sonrisa se dibuja en mi rostro. 

Son las diez de la mañana, la señora Freeman ha desaparecido de la casa - "¡ Gracias a Dios! " grita mi voz interior- ya que el horario de visita ha comenzado.

Carina está en su cuarto, lleva allí media hora encerrada y no me contesta. Me estoy enfadando. 

Finalmente, furioso, decido entrar en su habitación sin permiso porque ya estoy harto de que me ignore. Entro y miro cada esquina del cuarto ¡ Nada ! Ella no esta. 

Doy unas vueltas, salgo al balcón, ¡ Nada ! Después de un rato decido mirar en el baño y efectivamente, allí está. 

Miro la bañera donde Carina se ha quedado dormida. El agua cubre su cuerpo hasta los hombros más o menos y sus rodillas sobresalen del agua. Me acerco y meto una mano en el agua. ¡está casi helada ! Rápidamente y sin pensarlo dos veces, la agarro por debajo de las rodillas y apoyo su espalda en mi brazo y la levanto.

La dejo sobre la cama donde antes he colocado su bata de baño. Suavemente le coloco una mano y después otra para que no tenga frío. Su sueño es muy profundo. Abro el armario donde Carina tiene ordenada toda su ropa y abro el primer cajón que encuentro en busca de unas bragas y un pijama para cambiarla. Finalmente consigo encontrar unas braguitas rosas de encaje. Ligeramente agarro una de sus piernas y paso la bata por encima para secarle y repito el proceso con el otro.

Quito el edredón y después de secarla con la bata, la vuelvo a coger en brazos y la meto despacito en la cama colocando el edredón por encima para que no  pase frío.

Coloco la bata en su sitio y salgo de la habitación dirigiéndome al salón para ver la tele.

" Maricón" grita mi subconsciente " eso es lo que te has vuelto " continua este.Muevo la cabeza intentando apartarlo de mí, "tienes una chica desnuda delante tuyo y que haces ¿ la acuestas ? " "imbécil " me vuelve a decir.

 - Cállate- murmuro haciendo que se calle.

Enciendo la tele y cambio de un canal a otro. El tiempo pasa bastante rápido. Sobre las dos y media consigo escuchar el sonido de la puerta de la habitación abriéndose y al rato veo a Carina aparecer. Esta cubierta con el edredón que tapa su hermoso cuerpo de hombros para abajo y está mirándome los pies,avergonzada y roja como un tomate.

La miro, me levanto y me acerco a ella.

- Buenos días, princesa - susurró cerca de su oído rozándole la mejilla.

- Buenos días - contesta esta tímida y sin mirarme.

- Mírame - digo con tono autoritario. Ella alza la vista y me mira a los ojos.

- ¿ Has dormido bien ? - pregunto .

- Siii- me contesta como una niña pequeña a su madre.

- ¿sabes que te has quedado dormida en la bañera ? - pregunto con tono enfadado 

- Lo siento - dice ella.

- No lo sientas - digo yo - ¡ pero te podrías haber puesto mala ! - grito y esta se estremece.

- Lo siento - repite. 

- Carina, por el amor de Dios, cuídate más - digo mirándola fijamente. 

Eithan el playboy.[+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora