My last diary.

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29/04/2010

Dear diary,

Han sido unos días terribles aún, estos días he llamado un par de veces a Finn pero aún no quiere contestarme.

Chloe me ha dicho que vendría a mi casa este fin de semana, iba a hablar conmigo sobre lo que había pasado. También sonaba preocupada y no puedo esperar con más ansias a que sea mañana por la tarde, dijo que se quedaría así que preparé la casa y el cuarto de visitas para que se viera decente para mi amiga.

Me ha costado un poco seguir con mi rutina sin Ethan, el formaba parte de ella en un 80%, me sentía bastante sola. Le intenté llamar pero su número me aparecía como inexistente, al parecer su promesa de irse de mi vida para siempre se la había tomado muy enserio.
Ahora mismo estoy en mi cuarto pasando todo lo que escribí en mi teléfono al diario en papel, era mi forma de desahogo para poder librarme un poco del dolor que siento.

No espero que Ethan me perdone, lo lastimé y lo lastimé bastante. Pero si espero que Finn me perdone, lo dejé todo por él, no de la forma que hubiera querido pero al fin de cuentas lo hice. Yo sí quería un nosotros. Siempre lo quise.

Espero con ansias a que sea mañana para poder recibir a mi amiga, hablar de todo y esperar a que no nos volvamos a distanciar.

(Rachel fuera del diario)

Me levanto de la cama y me dispongo a tomar un baño, me iba a meter a la tina cuando suena el timbre de mi casa. Confundida voy hacia la puerta para ver quien es y me encuentro con unos ojos marrones tan preciosos.

Abro la puerta y no me importa nada, no me importa sólo estar en bata o que las vecinas chismosas digan cosas de mí entre ellas.

-Finn. -digo en un susurro, suspiro de alivio. Su cara no parece de alguien molesto y está aquí, ¿esto significa que me ha perdonado?

-Hola, Rae. -lo miró sin creer, mi estomago me duele de los nervios y mi respiración se agita un poco. Me mira un poco nervioso. -¿Me invitas a pasar?

-Oh, claro. -me rio nerviosa y me hago a un lado para que pase.

-Me gusta tu casa, es linda. -dice mientras le da una mirada a ml lugar, que bien que lo limpie antes de que viniera.

-Gracias, se hace lo que se puede.

No puedo con tanto nerviosismo, está tan incómodo el ambiente que se siente la tensión en el aire.
Lo miro a los ojos mientras que se acerca a mí.

-Perdón. -sale de mis labios como un sollozo.
Toma mi cara entre sus manos y me sonríe con ternura, sus ojos se hacen pequeñitos y yo sonrío también porque me encanta verlo así.

-No te preocupes, Rae. -me abraza con delicadeza y descubre un poco mi hombro, me comienzo a sentir nerviosa hasta que siento como con su dedo índice dibuja en el: "i love u".

Sonrío con todos mis dientes y me acerco a él para besarlo. Nos enredamos en un beso lleno de emociones, nos amábamos de eso no había duda, siempre hay esperanza para el amor y la de nosotros duró 12 años ahí, intacta.

Finn y yo pasamos parte de la tarde y la noche juntos, salimos a pasear como en los viejos tiempos, bebimos y cantamos en karaoke y cuando regresamos a casa, nos hundimos en una aura de amor verdadero.
Nos sentimos cada parte de nosotros, nos volvimos a conocer desde el fondo. Lo extrañaba mucho. Y creo que él también a mí.