Kara Danvers es una adolescente de 19 años de Midvale recién ingresada a la Universidad de National City, que se propone hacer las cosas diferentes esta vez.
Por supuesto que no será difícil adaptarse teniendo su ganga de amigos:
Winn, Maggie, Jame...
Finalmente Alex, Kara, Winn, Mon-El, Maggie, Sam, James, Iris y Barry habían llegado a National City. —Bueno chicos, aquí nos dividimos, renté una casa y Kara vendrá conmigo.-dijo Alex. Pues los demás se internarían en las habitaciones del campus de la Universidad.
—"demonios, olvidé eso, no estaré cerca de mis amigos como crei ¿y si esto termina cambiando nuestra dinámica de amigos?".- se preguntaba Kara preocupada, pues ella era el resistol, el súper Glu que unía al grupo. Si tan solo supiera lo que vendría.
Alex se estacionó en el campus. —Ahj, por fin, creo que ya se me desapareció el tracero por estar sentada tanto tiempo.—dijo tronando su espalda Maggie.—ah esto se siente bien.
—Muchas gracias por darnos el ride en tu carro Alex. —Si gracias.—dijeron Mon-El y Winn. Y le dieron el cachorro a Kara.
—De nada chicos.
Kara codeó a Maggie. —Oh...Gracias Danvers, a ver cuando volvemos a tener un viaje así.—sonrió metiendo sus manos en su chaqueta. Pues era de noche y la brisa estaba helada.
—Hmm... si es que dejo un cupo para ti, no acostumbro a amigarme con psicopatas.
A todo esto Alex no había conocido antes a Maggie, porque Kara nunca habló de ella, pues lo que más hacían era andar en motos prestadas ilegalmente sin licencia y en carreras a todo terreno, también ilegales.
—Hahah, entonces juzgas por primeras impresiones Danvers? Esta bien, no es como si cualquiera puede manejar mi personalidad.—dijo como si nada Maggie. Y Alex se sintió algo molesta, lo tomó casi como un reto pero al mismo tiempo no quería dejarse llevar por las palabras de una novata en la universidad.
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—Pff...-bufó. Teniendo más o menos una idea de cómo era Maggie y cómo le iría en la U, Si seguía con esa actitud. Esto no era el colegio.
Kara estaba despidiéndose de sus otros amigos en el carro rojo. —nos vemos el lunes chicos!.-sonrió caminando ya al auto de Alex. —Rrrnnn... —Alex! No empieces! —corrió detrás del auto y sus amigos se reían. Luego abrió la puerta y se fueron a la casa, que quedaba a 6 min de allí.
—"Cierto, la razón por la cual no podría vivir en el campus es porque tengo una mascota...jamás dejaría este cachorro a la deriva.".—pensó Kara sobandolo.
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