Epílogo del vol. 1.

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En algún lugar en medio de la oscuridad y solo iluminado por unas tenues velas con llamas azules, se encontraba una persona sentada en algo parecido a un trono mientras a su lado había otros dos que no estaban llenos, bueno, más bien no había nadie sentado en ese momento a su lado. Quien estaba allí sentado tenía una pose en la cual con su brazo derecho posado en el lado derecho del trono sostenía su rostro y tenía una sonrisa tétrica en el, las pupilas de sus ojos tenían la forma de una estrella extendida, es decir, con las puntas más alargadas de lo normal.

⎯ ¡Nada une a las personas más que el miedo y la posesión! ¿Amistad? ¿voluntad? ¡personalmente me encanta aplastar esas tonterías! ¡La humanidad es malvada... ira, miedo, odio, venganza, destrucción... la verdadera naturaleza humana es malvada... lo mismo es para nosotros, este mundo es demasiado aburrido. ¡Oh dios! ¿Por qué...? ¿porque creaste un mundo como este "solo porque si"?... bueno, entonces... supongo que es momento de jugar un poco... estoy deseando saber qué tipo de persona eres... contenedor de Dios...

¡¡Felicidades!! Tu chico afortunado, has sido seleccionado aleatoriamente de entre todas las personas de este lugar. Esta es la decisión más importante que tomaras en tu vida. El mundo está dirigido por aquellos que han vendido sus almas al diablo. ¿Quieres el poder...de controlar a todo el mundo? Si haces un pacto de sangre conmigo...ese poder... ¡puede ser tuyo! Sé que lo usaras con sabiduría.

Continuara...

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