Cinco

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Los siguientes días Samuel y Carla llegaron a ser más cercanos que nunca, ni ellos sabían si son novios o solamente dos personas que se sienten solas y disfrutan de compañía uno del otro. Carla ignoraba a Lu por días, tenía mucho miedo a enfrentarla después de que se dio cuenta que no va poder cumplir con lo que prometió. Cada día mas y mas le estaba gustando Samuel, el chico fue diferente, se preocupaba por ella, le hico sonreír, le hace sentir tranquilidad.

Tenía miedo de enfrentar a Lu ya que no va poder mentirle, va mirarla en los ojos y decirle que le gusta Samuel, además las dos no hicieron ninguna apuesta, eso la hico sentirse más tranquila aunque eso no cambia nada.

Anoche Samuel llego a casa en las 3 de la mañana, paso toda la noche en casa de Carla, le estaba ayudando prepararse para un examen. Por suerte su padre no estaba despierto pero el día siguiente paso toda la tarde en la tienda con él.

-¿Quieres preguntarme algo o qué? – dice Samuel mientras trabajaban

Desde que empezaron sintió que quería decirle algo, llevan días sin hablar y ayer se dio cuenta que Samuel paso toda la noche fuera de casa sin avisarle donde se encuentra.

-Te ves bastante cansado. – comenta

-Pues sí, estoy cansado.

-Samuel, recapacita de una buena vez.

Samuel deja lo que estaba haciendo, da vuelta para enfrentar a su padre.

-¿Por qué sigues tratándome como un idiota?

-Te estás comportando así, por eso.

-Muchas gracias.

-Hijo, últimamente te preocupas más porque esa chica que por tu propia familia, te encuentras aquí trabajando y es como si estuvieras en otro lugar.

-Estaba trabajando.

-¿En 3 de la mañana?

-Joder... estoy harto que siempre tenga que justificar mis actos, si pase toda la noche con ella es porque disfruta estar a su lado. Tú también eras muy joven, debías entenderme.

-Samuel, gente como nosotros no se mezcla con gente como ellos, métetelo en la cabeza.

El padre de Samuel tenía otra opinión sobre diferencias entre clases sociales que aun siguen insistiendo, sabía muy bien para quien trabaja su hijo y no le gustaba nada que este cerca de esa gente, sobre todo porque parece como si les respetaba más que a su propia familia.

El hecho de que Samuel ha empezado tenerle tremendo cariño a Carla parecía a punto de crear un gran conflicto familiar en casa de los García Domínguez.

Poco tiempo después Carla entra en la tienda, Samuel le explico muy bien donde se encuentra pero jamás pensó que iba verla por allí. Samuel se encontraba trabajando, averiguando si todo se encuentra en su lugar cuando sintió manos suaves de Carla sobre sus ojos.

-Hola, guapo. – suspira en su oído

Samuel sonríe, da vuelta.

-Viniste.

-Por supuesto.

-Joder, pensé que estos no son exactamente el tipo de lugares que visitas.

-No me ofendes, eh. – dice, golpeándolo sobre el brazo

-Me arreglas el día. – confiesa

Los dos estaban muy cerca de besarse, no dejaban de mirarse pero llegada de padre de Samuel los detuvo y dejo a un Samuel con muchas ganas de golpear algo o alguien.

Wicked gameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora