12

1K 113 81
                                    

Mierda. Mierda. Mierda.

Sentí ganas de llorar cuando realicé que todo había sido mi culpa por no mantener mi boca cerrada.

Aún seguía en ese callejon cuando alguien llamó a mi celular.

- ¿Hinata? ¿Estás con mi hermano? -era Temari.

-No...-limpié con fuerza una lágrima de mi mejilla- volvió a su apartamento. No quiere hablarme.

- ¿Tú estás bien?

-Si.

-Bien. Siento que tuvieras que presenciar eso, en serio lo siento. Solo quería saber como estaban, aquí todo sigue un caos.

-Está bien. Intentaré hablar con Gaara.

-No. Créeme, lo mejor será dejarlo solo por unos días o será peor, ¿está bien? Lo siento. Adiós.

Mordí mis uñas, algo en mi insistía en que fuera a buscarlo. Mi celular volvió a sonar, insistentemente.

-La fiesta -dije, al ver todos los mensajes de Ino.

No tengo ánimos de ir de fiesta, pero ya me había comprometido con ayudar. Tomé mis cosas y partí al lugar con los hombros caídos.

El lugar donde sería la fiesta de graduación era el mismo club de hace unas semanas atrás, en el segundo piso. Cuando al irme pasaron todas esas cosas con Naruto.

- ¡Por fin llegas! -gritó Ino, llamando la atención de Naruto y Sakura que también estaban ahí. La pelirosa golpeó el brazo de Naruto cuando notó que no me quitó la mirada de encima.

Terminamos de colgar las decoraciones y subimos los aperitivos que habían llegado. Cortesía de los padres de Choji.

-Quedo bastante bien -dijo Ino con orgullo.

-Si, te superaste a ti misma.

Todas las decoraciones eran plateadas y los de la mesa eran rojos por los colores del uniforme escolar.

-Cuando prendan las luces led todo esto brillará. Se verá genial en las fotos.

Dejamos a los chicos a cargo y nos subimos al auto de Ino para ir a su casa a prepararnos, un día antes habíamos dejado lo que usaríamos en la fiesta. Saqué la ropa de mi bolso y Ino soltó un grito ahogado.

- ¿USARÁS ESO? -exclamó apuntando a los jeans claros en mi mano. Asentí avergonzada- No.

-Pero Ino...

- ¡Claro que no! Es nuestra noche.

Buscó en su armario y sacó un pequeño vestido negro. Mi cara ardió.

- ¡No usaré eso!

- ¡No puedes usar jeans en una fiesta de graduación, Hinata, es contra la ley! -gritó alzando los brazos.

Estuvimos durante quince minutos debatiendo hasta que logró convencerme de usar el vestido.

- ¿Ves? Es como usar una falda.

-No lo es -murmuré.

El vestido tapaba lo suficiente pero seguía siendo muy revelador y era tan ajustado que marcaba cada curva.

-Te ves bien -dijo Sakura acercándose con un labial entre sus dedos. Suspiré derrotada y me miré en el espejo, vi a una persona completamente desconocida. Y me agradó.

-Gaara quedará a tus pies, créeme.

Mi confianza volvió a caer. Tomé la chaqueta del colegio para cubrirme y noté que tenía la de Gaara. Debió confundirse cuando tiré todo al suelo en ese callejón, mi autoestima seguía cayendo.

SubmissiveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora