19. Planeación

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Después de haberle contado todo a Carolina, nosotros estudiábamos toda la mañana y en la tarde planteábamos como saldría de aquí.

Desde entonces ya había iniciado a analizar a Joy para mí escapada, era díficil saber que dirás saldría porque a veces estaba toda la mañana en la casa y otras no aparecía hasta el día siguiente.
Carolina era buena, me había traído unos lentes de contactos suyos para ocultar mi heteronocromia y poder huir.
Ya era jueves, se cumplían 4 meses desde que vi por última vez a mí familia.

Que rápido la mente olvida.

Pero, más cosas pasaban.
Joy me daba todas las noches después de comer una pastilla que el estaba experimentando, no había efecto durante las primeras semanas. Pero últimamente me sentía más agitado y habían momentos donde la respiración me faltaba, no le veía motivos por el cual decirle algo a alguien pues no voy a dar toda mi información a cualquiera.

- ¿Entonces Joy los martes no sale? -pregunto Carolina mientras yo terminaba unos ejercicios de trigonometría.

- Últimamente no.

- Entonces los días Domingos, Sábados, miércoles y martes están descartados. -suspiro-. Bien, entonces entre los días lunes, jueves y viernes es para que vallamos lo más pronto a la policía.

- Pero, yo estoy como su hermano menor.

- Es verdad, pero. ¿Y si le cuentas lo que viviste?

- Caro. ¿Crees que todos me creerían?

- ¿Vale la pena intentar?

- Hay que seguir haciendo el plan inicial. -le sugerí mientras cerraba mi cuaderno-. Acabé.

- Ah, ah, ah. No, pasa el cuaderno que debo revisar.

Chasqueé la lengua y le entregué el cuaderno de mala gana y ella me sonrió.

- Eres bueno en las letras pero un asco en los números.

- Si quiero estudiar para doctor. ¿En donde mierda le voy a meter la hipotenusa?

— ¿En qué maldita universidad te aceptarán sin pasar el examen?

— Touche.


— Joy, ya son las 10 am. ¿Carolina no va a venir?

Le pregunté a mi “dueño” da asco decirle dueño y pues, me reuse desde un inicio a decirle así, por lo tanto le dijo Joy.

— No, tiene una entreviste de trabajo para el hospital central de psicología.

Es verdad, lo había olvidado. ¡Iba a postular hoy!

— Que raro que no te contara nada.

Lo mire confundido y negué.

— No, si me avisó. Me olvidé, últimamente tengo algunos recuerdos confusos, juraría que me dijo que sería en dos semanas.

— Oh.

— Iré al escritorio a hacer lo que me resta de tarea.

— Oliver.

— ¿Si?

— Estamos próximos a fin de mes. ¿Verdad?

— Supongo, no tengo contacto con el calendario. —Tremenda mentira.

— Bueno. La próxima semana viene mi celo.

Abrí mis ojos y retrocedí un poco.
Carolina me había dicho que tuviera cuidado con el celo de un alfa, no quiero tener hijos, menos vincularme para siempre con él.

La historia de un Omega [omegaverse]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora