La historia de un Omega [omegaverse]

8. Pasado

El silencio rodeaba la sala y la soledad me acompañaba. 

¿Qué hago a las 4 de la mañana sentada en la sala como idiota?

Di un suspiro y miré por la ventana que daba al patio.
Baje mis pies del sofa y camine descalza hacia la puerta que daba hacia afuera.
Salí y el viento mañanero me recibió, una sonrisa llena de nostalgia se formo en mis labios.
Baje los primeros tres escalones y el cuarto lo salte, ese siempre saltaba Oliver, según él había oído una leyenda muy poco hablada sobre el: "escalón del diablo"  

Si, creo... creo que me lo dijo cuando fui a recogerlo al colegio y lo encontré todo golpeado, recuerdo ese día y lo atesoro con todo mi corazón...

Su cabello estaba desordenado, su uniforme sucio y todo desordenado con algunas manchas rojas, su labio reventado y unos moretones en su cara.

—¿Oliver? —pregunte con los nervios apoderándose de mi ser.

—¿Sa-sally?

—¿¡Qué te pasó!? ¿¡Quien te hizo esto!? —me acerque a abrazarlo mientras el sollozaba en mi hombro pero no me contestó. Solo guardo silencio mientras apretaba su agarre cada vez más—. Oliver, dime.

—Ya no importa. ¡Vámonos!

Asentí y él me agarró la mano y salió a paso apresurado del colegio.

«Fue mi error, fue por mi culpa lo que vino después...»

Cuando llegamos a casa mamá casi le da un paro al ver a Oliver así.
Me reprendió y luego se llevó a Oliver al doctor dejándome con el deber de arreglar la casa y terminar de cocinar. 

Cuando Oliver volvió del hospital todos fueron a verlo y yo estaba justo en la sala con mi PC portátil cuando ellos llegaron.
Oliver traía unas curitas y su labio estaba cosido. 

—Sally. ¿Qué ocurrió? –pregunto papá cuando terminó de contemplar a Oliver y sus heridas.

—No lo sé, yo llegue cuando el ya estaba así.

—¿No preguntasteis? —hablaron todos a coro menos Oliver quien aún tenía lágrimas en los ojos. ¿Por qué llora? Ya tiene 9, debe aprender a defenderse. No siempre vamos a estar ahí para él.

«“Me arrepiento de esas palabras ahora más que nunca”»

—Pues obviamente no. Oliver me sacó en carrera de ahí.

—¿Qué acaso no te importa tu hermano?  —me reprendió mi mamá pero no conteste—. ¡Sally responde!

—¡Ya me tienen harta! —grite mientras cerraba abruptamente la PC y me levantaba y salía con pisadas fuertes de la sala.

Cuando llegue a mi cuarto me tire sobre la cama junto al PC mientras unas lágrimas traicioneras se resbalaban por mis mejillas, mojando mis lentes y mi almohada.

—This is bullshit... –susurre mientras apretaba la almohada callando así mis sollozos.

Me levanté de golpe al sentir como en mis sueños me caía.
Miré a mi aldedor y vi una silueta oscura. Lo más lógico que hice fue agarrar mi almohada y lanzarlo contra esa persona haciendo que está se caiga y yo me posicione sobre el poniendo la almohada en su cara con un intento de asfixia pero todo se vino abajo cuando alguien me agarró de las axilas mientras me elevaba en el aire alejando de a poco mis pies del suelo.