Enamorado de mi Tutora

Capitulo 22:Colmillos , música y fuego

Cuando sus labios se separaron, Naruto y Hinata no podían parar de sonreír. Cada vez que el chico se alejaba a mirarla, volvía a llenarla de tiernos besos por toda la cara, impactado de poder, al fin, tener a la mujer de sus sueños entre sus brazos.

-Hinata, ¡Nunca más nos separemos! ¡Se mía, mía, mía!

-Pe… perdóname, Naruto, por desconfiar así de ti…

-¡Estás loca! ¿Cómo me pides perdón? Fui un idiota, no puedo cometer ese tipo de errores. ¡No cuando se trata de alguien como tú!

Con una sincera sonrisa, Hinata volvió a ponerse de pie sobre el suelo y con la mirada fija en Naruto, le dio un tierno beso en la mejilla que hizo que el chico se estremeciera.

-Me tengo que ir, Naruto. Mis padres me van a matar. Me quedé donde Kiba más de lo que debía y…

-¿Qué hacían?

Hinata lo quedó mirando por unos segundos. El tono de celos con que el chico había hecho aquella pregunta había sido muy tierno pero a la vez gracioso.

-¿Estas… estas celoso? – rio la chica.

-¿Celoso, yo? ¿De Kiba? ¡Ja!

-Naruto, de verdad debo irme… mi papa me matará.

-¡Espera! – Le pidió, tomándola de la mano lo suficientemente fuerte como para que ella no pudiera soltarse. – prométeme algo.

-¿Qué?

-Que de ahora en adelante vas a ser mi novia.

-¡Naruto-kun! – Sin poder contenerse, Hinata se arrojó a los brazos de Naruto y le plantó un beso de lleno en los labios, que solo rompió para responderle - ¡Te lo prometo!

Fue una pena para ambos que aquel momento durara tampoco. Ninguno quería irse, sin embargo, Hinata sabía que no podía quedarse ni un segundo más. Cuando la chica llegó a su casa, de noche y toda mojada, su padre la estuvo retando por, por lo menos, treinta minutos, y aunque eso, normalmente, la habría hecho sentir mal, ese día no surtió efecto en ella. De hecho, ni si quiera había estado escuchando a su padre mientras éste hablaba, pues en su mente se reproducía lo que acababa de vivir, una y otra vez.

Una vez que su padre la dejó libre, ella corrió a su habitación y encendió su computadora. Se llevó una grata sorpresa al conectarse a su facebook y no solo ver que Naruto había cambiado su estado sentimental de "soltero" a "Tiene una relación con Hinata Hyuga" y además había escrito:

"Feliz, feliz, feliz, feliz! Hinata eres la mejor! Me haces el mas feliz del mundo!"

Ella se apresuró a modificar su información, también, y responderle a su novio. No tenía mucho que decirle, pero sus palabras fueron tiernas y sobre todo precisas "Te quiero".

-¡Hola! ¿Cómo estás? ¡Tanto tiempo, eh! Yo pensé que ya no volvería a verte por acá, la verdad, no me imagino que lugar te queda libre para perforar.

Pein rio, ante el comentario de Tsume Inuzuka, pero negó ligeramente con la cabeza. Aquella mujer le parecía increíble. Envidiaba a quien fuera que la tuviera como madre.

-No, esta vez no soy yo quien se perforará. Si no mi novia, Konan.

-No hay problema. – También Tsume había perforado a Konan. Una vez en su ombligo y otra en el labio inferior - ¿Quieren esperar a que termine con este tatuaje? Mi hijo está disponible pero…

-Creo que deberíamos esperar.

-Pein, no tengo mucho tiempo, si su hijo está desocupado…

-No lo sé.