It's you ♡ (Editando)

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El lentamente se acercó a ella y sin decir nada se sentó a su lado. Jennie volvió su mirada a el horizonte. Jugaba con sus dedos y mecia sus piernas.

— ¿cómo has estado? — después de un largo silencio, el pelinegro decidió romperlo.

— bien — respondió tranquilamente como si nada hubiera pasado y en realidad estuviera bien.

— no me mientas — dijo Taehyung microsegundos después de que ella terminara la palabra.

Jennie ni siquiera se inmutó en mirarlo. Sabia de lo que estaba hablando, lo de Irene, lo de las cortadas... sobre todo. Esos últimos dos días fueron una tortura para ella, y creía que lo único que su mejor amigo quería era que se desahogara.

— ¿qué quieres que te diga? — los dos se miraron.

Se le desgarró el corazón ver su mirada, con tan solo ver sus ojos. Esa mirada perdida que gritaba que ya no podía. Las venas de sus ojos estaban irritadas y parecía que sus párpados pesaban.

Taehyung con suma delicadeza destapó sus muñecas y las tomó. Una lágrima resbaló cuando en vez de sentir su delicada piel sintio gazas. Destapó sus brazos y vio las cortadas, unas ya cicatrizadas y otras resientes.

El beso cada cicatriz com cuidado de no causar dolor en Jennie. Ella solo cerró sus ojos disfrutando del toque de sus labios con su piel. Quería llorar pero ya no podía.

Agarro sus manos y la unió. Sin decir nada le estaba transmitiendo tanto. Cuando Taehyung pensaba que no diría nada, escucho su voz.

— han pasado cuatro años — suspiro — cuatro años desde su suicidio pero es como... si hubiera sido ayer que mi madre se haya quitado la vida y esa escena de ella tirada en el piso con sangre saliendo de sus muñecas y el frasco de pastillas en el lavabo se sigue repitiendo en mi mente.

— ¿pero por qué lo haces? — pregunto en un hilo de voz.

Solto un suspiro — ¿sabes cómo se siente que tus propios pensamientos te digan que eres una mierda? — los dos cruzaron miradas — Y todo empeoró al ver a mi padre con depresión y... las cortadas fueron más constantes. Al principio fue fácil fingir que todo estaba bien, pero nunca pensé que eso me haría más daño.

Si Taehyung pensaba que estaba sufriendo el dolor verdadero por la separación de sus padres, estaba loco si lo ponían a comparar la situación de Jennie. Ella sí sufría en realidad.

— extraño a mamá  — susurro.

Taehyung siempre pensó que no había sufrido tanto por la muerte de su madre, claro al principio fue difícil pero luego lo superan y siguen con sus vidas. Pero ese pensamiento cambió al escuchar de los labios de Jennie todas las secuelas que el suicidio de su mamá había dejado.

— Jennie, necesito que me mires — sus ojos se encontraron — yo te necesito para ser feliz, te necesito a mi lado.

— Tae tu tienes a tantas personas que te quieren... tu no me necesitas — desvío la mirada

El la tomó de sus mejillas y la voltio lentamente regalándole una sonrisa — puedo tener a varias personas a mi alrededor, pero tu eres y serás mi persona. 

Los dos se perdían en los ojos del contrario. Jennie sabía que Taehyung hablaba con sinceridad, y ¿para que mentir? Ella también lo necesitaba. Juraba que no lloraria más esa semana pero las lágrimas no tardaron en salir, peoro en vez de lágrimas de tristeza eran de alegría.

Taehyung río levemente y con su pulgar limpio sus lágrimas lentamente. No lo penso dos veces y la abrazo como si el mundo se acabara ahí mismo. En su mente prometió protegerla de todo y de todos, hasta de el mismo. Aspiro el olor que su pelo desprendía de el sintiendo su corazón latir desenfrenadamente, pero lo último que le preocupabera eso.

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Habían pasado dos días desde lo que pasó, y Taehyung se encargaba de hablarle a primera hora del día para asegurarce que estuviera bien y claro cuando se veían el siempre la mimaba.

Jennie le prometió o más bien le juro que si tenía la necesidad de autolesionarce, le hablaría a él y solo el. De verdad agradecía la preocupación de Taehyung pero gracias a esa plática que habían tenido había jurado que nunca más lo haría.

— Jen, ¡Jennie! — exclamó Jisoo sacando de sus pensamientos a la castaña quien la miro confundida — ¿acaso estas enamorada? Te noto perdida.

Jennie río ante las ocurrencias — claro que no Jichu, pero bueno como me decían, espera ¿que decían?

Lisa quería explotar en carcajadas por lo perdida que estaba Jennie, le llegó un pensamiento que no dejó pasar y no dudo en compartirlo con Rosie quien abrio los ojos cuando Lisa le susurró lo que pensaba.

— ¿qué tanto están diciendo?

Rose le dijo a Jisoo sobre la sospechas de la menor del grupo y al igual que Rose quedó sorprendida. Mientras Jennie observaba la escena curiosa.

— bueno mi querida Jen Jen tenemos una emergencia, así que nos vamos — antes de que la mencionada reaccionara, sus tres amigas ya se habían ido.

Em otro momento se hubiera enojado, pero estaba muy feliz como para preocuparse por los secretos de sus amigas. Se paró de la mesa y empezó a caminar tranquilamente por el campus de la univercidad. Era un día soleado pero frío a la vez, algo perfecto para los gustos de ella.

— Jennie.

Escucho una voz conocida a lejos por lo que se voltio rápidamente encontrandoce con Baekhyun quien se acercaba a ella quedando frente a frente.

— Hola Baekhyun — saludo con una sonrisa, muy hermosa para los ojos del chico.

— hola Jennie — le respondió de la misma manera — ¿te puedo acompañar? Claro si no te molesta.

La castaña río, este chico era muy tierno. Lo tomo del brazo y empezó a caminar. Entonces eso era un "si".

Por otro lado, tres chicas llegaron corriendo a la cafeteria donde con la mirada pudieron ubicar a sus novias y a Taehyung. Se acercaron a su mesa y se sentaron rápidamente.

— chicas ¿qué... — antes de que Jimin pudiera terminar la oración, Jisoo lo interrumpió.

— Taehyung creo que le gustas a Jennie — solto rápidamente.

— ¿¡que!? — el pelinegro abrió sus ojos en grande, toco sus labios y recordó el beso.

— tienes que contarnos lo que paso, porque se que escondes algo — murmuró Jimin.

Sabia que había pasado algo más que caricias y palabras melosas entre Taehyung y Jennie.

— bueno en la fiesta de mi madre n-nos... besamos.

Los chicos quedaron impactados por la confesión y las chicas chillaron de alegría. En realidad ellos no tendrían que planear nada para que Taehyung y Jennie tuvieran algo, ellos creaban la magia por si mismos.

— amigo encerio te admiro — Jungkook posó su mano el hombro de el chico — no cualquiera puede besar a alguien sin llegar a ser algo, tu me entiendes, sin ser novios.

— a mi me tomo dos malditos años, siete meses, dos semanas y cinco días en darle aunque sea un pico a Rosie — hablo Jimin entre risas.

— Jimin, amor, mejor no hables — la chica le lanzo una mirada amenazante a su novio que lo hizo callar.

— parece que no será tan difícil — susurro Lisa — de todas formas ustedes se quieren ¿o me equivoco?

Por supuesto que no mi
querida Lisa, bueno por mi parte
yo si la amo.

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