It's you ♡ (Editando)

Extra

— Maldito tráfico.

Gruño Taehyung viendo como más adelante los autos estaban embotellados en la calle y esto causaba que el tráfico fuera aún más lento, llevaba esperando una hora atrapado con este montón de vehículos que al igual que el esperaban pasar. Esto solo sumaba a su mal humor y sus ganas de llevar con la más pronto posible a su casa; se había quedado más tiempo del que creía en su oficina, coordinando ciertas cosas y revisando mucho papeleo sin haberse dado cuenta de que ya era tarde y una persona especial lo esperaba en casa.

Se regañó mentalmente por no revisar el reloj constantemente y sin más había dejado todo eso pero hacerlo mañana e ir a casa lo más rápido posible para estar con su amada e y descansar, pero el tráfico se veía como un impedimento. Soltó un sonoro suspiro al ver que la circulación de tráfico empezaba a mejorar por lo que presionó en pedal y avanzó lo más rápido posible (sin exceder los límites de velocidad).

Lejano a todo lo que había creído, se había convertido en un gran empresario muy reconocido en Corea por ser dueño de una cadena hotelera de mucho prestigio. Después de todo, se había convertido en un empresario relativamente joven pero aún con mucho que aprender en ese mundo. Eso traía consigo varios pros y contras; el dinero que dejaba el tener hoteles por doquier en el país era sumamente bueno y podía darle lo mejor a su familia pero el poco tiempo que eso dejaba para su vida personal era demasiado poco, casi escaso y se culpaba con eso. Sin mencionar el agotamiento tanto físico como mental.

Pero ella siempre era comprensiva con el, lo apoyaba e impulsaba, lo levantaba y reconfortaba si era necesario. Sin ella... el no era nadie.

Tan inmerso estaba en sus pensamientos que no se había percatado de que ya había llegado a casa. Salió del auto con su maletín en mano y entró a la casa con sumo cuidado de no hacer ruido, ella ya debía estar dormida y estas últimas semanas la había notado más cansada de lo normal, lo que menos quería era despertarla. La casa estaba sumida en un profundo silencio como si no hubiera nadie en ella, su amada solía ser muy silenciosa en casa y normalmente se encontraba en su habitación o en la habitación que habían convertido en oficina para ella.

Subió las escaleras lo más rápido posible aún cuando sus pies estaban cansados.

Sus ojos tan solo querian verla, su cuerpo anhelaba aprisionarla en su brazos y no soltarla por un largo rato, sus labios solo deseaban rozar aquellos dulces belfos, solo quería escuchar esa voz suave diciéndole cosas lindas; con ella todos sus pesares ya no existían y  solo eran ellos. 

Giro el pomo de la puerta lentamente para que este hiciera el menor ruido posible, sus ojos se sorprendieron al verla despierta y trabajando. Se encontraba sentada en la cama con la computadora en sus piernas mientras tecleaba rapidamente, con los lentes que usualmente usaba cuando trabajaba. Estaba tan inmersa en lo que hacía que parecía no haberse percatado de la llegada de su esposo.

— ¿No piensas saludarme?

Taehyung sonrió y se acercó hasta quedar enfrente de ella —. Creí que estarías dormida ¿comiste algo?

Unieron sus labios en un corto beso como saludo, cuando se separaron Taehyung empezó a cambiarse y Jennie siguió con lo suyo.

— No, no tenía apetito y preferí adelantar algunas cosas del trabajo — contesto con simpleza pero esto no impidió que esa mirada regañante de Taehyung se posara en ella.

— Jennie — llamo serio —. Estos días te he notado más cansada y con poco apetito, eso me preocupa ¿algo esta pasando?

— No es nada solo son pequeños malestares, nada de que preocuparse —  hablo con tranquilidad —. Y acerca del cansancio, en realidad he tenido mucho  trabajo y no he podido dormir bien estos días. Eso es todo.