Capitulo 27: La fiesta ¿Navideña?

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Cuando termine de adornar los regalos navideños me di cuenta de que eran las 5:58pm de la tarde, mierda, tenía que cambiarme y ponerme algo más apropiado para la ocasión, busque en el closet y había un vestido negro corto, la verdad tenía tiempo que no usaba un vestido así que estará bien usarlo, empecé a quitarme toda la ropa hasta solo quedar en ropa interior y darme una ducha rápida, para cuando salí eran las 6:10pm, bufe molesta, ¿Acaso el tiempo está en contra de mi?

¡Esto me daba vueltas! El todo el tiempo que he estado aquí, el tiempo no ha sido mi mejor aliado, parpadeo son las 6:10, de nuevo parpadeo y ya son las benditas 7 ¡y debería estar en la jodida fiesta! Al finalizar me puse ropa interior limpia y me puse el vestido, perfecto, ahora solo quedaba los zapatos, mire de nuevo mi celular ¡por todos los cielos! Eran las 6:50 pm.

-Oye Brittany ¿estará bien si llevo una… ¡Wow! Te ves divina- dijo Albert.

Solo me sonroje.

-Ah sí… ejem decía si estaba bien ¿si llevo una chaqueta?

-Como sea

-Bien

-¿Al?

-¿Si?

-No nos quedemos mucho tiempo en la fiesta, la verdad no conozco a muchos y me voy a sentir rara- le dije.

-Bah tonterías, seremos los mismos de siempre

No dije nada, no tenía muchas ganas de pasarla en grande en la dichosa fiesta, pero tampoco quería estar como monja de convento encerrada en la casa sin hacer nada, la navidad se asomaba, y mis hermanas durante el trayecto en el que se había ido ¡nunca me enviaron las dichosas cartas! Lo bueno que se acordaron de mi, y pudieron llamarme, me sirvió, conocí a los suculentos de los hermanos de Albert ¡Porque la mala suerte siempre esta de mi lado! No digo que Albert sea feo, de hecho todo lo contrario es demasiado atractivo como el infierno, pero creo que su personalidad la caga, la caga total, aunque como dije y siempre diré ¡Arrogante se nace, no se hace! Al tanto pensarle, nos habíamos despedido de Victoria, James no estaba, supongo que estaba trabajando.

-Brittany antes de que subamos en Teddy ¿Puedo pedirte algo?

-¿Qué quieres?

-¿Puedo confiar plenamente en ti?

-¡Qué tontería! ¡Claro que sí! ¿Somos amigos, no?

Acto seguido, Albert tomo mis manos.

-Entonces confiare en ti… Brittany

-¿Qué te sucede?

-Bueno, necesito decirte que en la fiesta estarán… Tom y Jack

-¿Y? -dije no muy animada.

-Que ellos, son los jodidos amos de la borrachera

-Oh ya veo a lo que te refieres, quieres decir que cuando te pongas hasta atrás ¿yo te salve el culo?

-Así es… ¡Brittany eres muy inteligente, pequeña! Bueno no del todo de que me salves, puede que tú también te pongas bastante ebria

-No, acabo de hacer un pacto de que no volveré a tomar ¡jamás!

-Ya lo veremos, dulce… ya lo veremos

En el tono en el que lo dijo no me gusto para nada, puso en marcha a Teddy, y ya nos dirigíamos a la fiesta de la que tanto hablaban, espero sea buena, que sea en vano de lo que hablaban, para cuando llegamos, era en una casa de dos pisos estilo Miami, muy bonita y en frente de esta tenía dos palmeras enormes, las ventanas de la casa cambiaban de color uno tras otro, quería decir que la fiesta ya había comenzado, espero que Albert y yo no seamos los últimos ¡Qué pena! Albert salió primero y abrió mi puerta como todo un caballero, deberían así los hombres ser ¿Qué esperas? ¡Toma nota! Al llegar Albert abrió la puerta como si fuera un vagabundo en su propia casa, ¿Qué acaso la gente de Indiana no tenían educación?

Chica Citadina EN EDICIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora