-LADY OSCAR NEWS DREAMS-
Arco II: "Identidad"
Capítulo XXV: "La Oscuridad del Corazón"
-¿Por qué lloras así? ¿Qué sucede? – Preguntó Oscar preocupada por la reacción de Fernanda, acercándose a verla. - ¿Por qué dices que no pudiste? ¿No pudiste qué? –
-No pude más... ¡No me quiero casar con André! – Exclamó la austriaca, saltando a los brazos de Oscar, comenzando a llorar desesperada. - ¡No me quiero casar...! ¡No quiero! ¡No quiero...! –
-¿Por qué dices eso justo ahora? – Preguntó Jarjayes, sin entender lo que sucedía.
-Porque... ¡Porque yo solamente te amo a ti...! – Confesó finalmente la menor, aferrándose a Oscar sin poder controlar su llanto. - ¡Siempre...siempre te he amado solamente a ti! ¡Yo no quiero casarme con André porque no lo amo...! Yo... yo quiero casarme... ¡Yo quiero casarme contigo...! –
-Fer... - Murmuró Oscar atónita, sin poder creer en lo que escuchaba. – Estás bromeando, ¿verdad? –
-¡Estoy siendo totalmente sincera contigo! – Exclamó la austriaca, tratando de tranquilizarse para al fin liberar todo lo que tenía acumulado en su interior. – Desde hace años he estado callando este sentimiento...desde el día en que te vi por primera vez, cuando tuvimos el accidente en París y que tú tan amablemente me ayudaste, ¿lo recuerdas? –
-Nunca lo olvidaría, fue la primera vez que vi unos ojos tan puros como los tuyos. – Respondió Jarjayes, desviando su mirada hacia el techo, perdiéndose en el infinito. – Pero me es imposible creer en tus palabras. – Agregó, sorprendiendo a Fernanda. – Te he visto tantas veces besar a André sin importarte quién pudiera verte, le hablaste de su relación a quienes considerabas tus amigos más cercanos...me confesaste abiertamente que te habías enamorado de él, ¡por favor, Fernanda, aceptaste casarte con él! –
-¡Porque tú me rechazaste! – Interrumpió Fernanda en reproche, empujando a Oscar con sutileza para verla fijamente al rostro. - ¡Te pregunté si querías que me casara con André y me dijiste que sí! ¡Te di la oportunidad de que me dijeras si me querías de la misma forma en que yo te quiero! Y me rechazaste, Oscar... ¡Me rechazaste! –
-¿Y por qué no lo dijiste en ese momento? ¡Tú también podías hacerlo! – Reprochó Oscar mirándola fijamente a los ojos. – Dios, Fernanda...todo este tiempo has estado jugando con los sentimientos de André, ¡lo ilusionaste! ¡Ilusionaste a mi mejor amigo, a mi hermano! ¿Por qué? ¡¿Por qué?! – Exclamó tomándola de los hombros, intentando comprender lo que sucedía. - ¡¿Por qué no me dijiste lo que sentías aquella vez en lugar de hablarme del afecto que tenías por André?! –
-Tenía miedo...mucho miedo... - Murmuró Fernanda entre lágrimas, desgarrada por dentro. – Hay algo que escondo desde que tengo memoria, salvo mi madre y algunas mucamas que me cuidaron desde que nací en Austria lo saben...me educaron toda la vida para que nunca permitiera que alguien descubriera esa verdad, de lo contrario...yo podría...yo...podría...podría... -
-¿Podrías qué? ¡Habla! – Ordenó Oscar, comenzando a exasperarse por la situación.
Fernanda comenzó a sollozar con amargura sin poder controlarlo, un nudo en la garganta le impedía hablar con claridad, negaba repetidamente con la cabeza mientras trataba de controlarse para seguir hablando.
-No puedo...no quiero que me desprecies...tu no... - Murmuró ahogadamente, apretando con fuerza su uniforme, dejando caer el anillo que alguna vez marcó el compromiso con André. – No puedo decirlo...no me obligues...por favor... -
Oscar la soltó en silencio mientras jadeaba frustrada, respiró hondo intentando acumular todos esos sentimientos revueltos en un solo punto para liberarlos de golpe en un suspiro largo y doloroso, su puño se apretó inconscientemente, dirigiendo un fuerte puñetazo a la puerta entreabierta, cerrándola con un golpe estruendoso que resonó en la habitación, aturdiéndolas.
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Lady Oscar: New Dreams
أدب تاريخيDespués del matrimonio de Marie Antoinette y Louis XVI, Fernanda (la hermana menor de Marie) llega a Francia con el fin de quedarse a vivir en Versalles, conociendo de esa manera a Oscar François, la Comandante Imperial que protegía a su hermana. Es...