ℋℯ𝓇𝓂𝒶𝓃𝒶 𝒹ℯ 𝒥𝒶𝓏ℯ » ᴄᴀᴄʜᴀ

25

Al día siguiente estabamos Lidia, Jaze, Edu y yo en el auto para festejar mi cumpleaños con mi mamá y mi papá, el problema es que mis padres no se llevan bien y mi mamá no sabe que lo invité a él, y le mentí a mi papá sobre de que mamá sabía de la invitación.

Al respecto de Zaina, Nacho y Valentín, ellos se fueron al centro a pasear un rato por la ciudad, aunque Valentín ya conocía bastante.

--¿Estás emocionado amor? Vas a conocer a mis padres --. Hablé felíz mientras sonreía y tomaba sus manos.

--Em... más o menos.

--Igual, el problema no va a hacer que les caigas mal, Cacha, el problema va a hacer cuándo papá caiga en la casa de mamá sin que mami sepa --. Habló Jaze, enfatizando las últimas palabras.

--Va a salir todo bien, no hay que pensar en negativo Juan --. Hablé pensando en que mis palabras ojalá sean ciertas.

Apoyé mi cabeza en el hombro de Edu y me quedé viendo por através de la ventanilla.

Al llegar bajé del auto, aún de la mano con Edu y caminamos hasta la puerta de entrada.

Al estar en frente toqué el timbre, y sonreí emocionada por que mi novio y mi mamá se iban a conocer por primera vez.

Miré a Edu y le sonreí. Él me devolvió el gesto con otra sonrisa aunque un tanto nerviosa, así que yo hice puntitas y le dí un besito en los labios y le susurré "Todo va a salir genial".

La puerta se abrió y salí corriendo a abrazar a mi mamá, ella me acepto el abrazo y me dió un beso en la cabeza.

Al separarnos, mamá abrazó a Jaze y luego a Lidia.

--Mamá, el es Eduardo, o también más conocido como Cacha, pero es mi novio --. Dije alegre y adelante un poco a Edu apoyando mis manos en su espalda, ya que estaba bastante duro.

--Un gusto --. Saludó mi mamá.

--El placer es mío --. Contestó Edu tomándole la mano.

--Vengan, pasen --. Dijo mi mamá y los cuatro entramos y nos sentamos en las sillas.

Deberían de haber pasado unos 20 minutos en los cuales mi mamá estuvo charlando con todos nosotros, aunque muchas veces le hizo más preguntas a Edu, para conocerlo más.

El timbre sonó y mi corazón empezó a acelerar.
Sabía que la persona que se hallaba del otro lado no le iba a hacer mucha gracia a mi mamá, pero en fín, es mi cumpleaños y esto se pasa en familia, y más aún si a mí me gusta.

--Yo abro --. Dije, y me levanté de mi asiento dirigiéndome hacia la puerta.

Al abrirla, me encontré con una figura que fácilmente pude reconocer.

--¡Papá! -- Hablé emocionada y extendí mis brazos para abrazarlo.

Él me abrazó fuerte como si fuese la primera vez que nos viéramos, aunque así fuese.
Hace bastante no lo veía y lo extrañaba muchísimo, ya que por su trabajo no lo podía ver casi nunca.

--Cande... te extrañé mucho hija --. Habló mi papá separándonos del abrazo.

--¡Paa! Te extrañé. ¿Cómo anda todo? -- Habló Jaze parándose de su silla y acercándose a papá.

--Todo muy bien, hijo, a tí también te he extraño muchísimo --. Dijo y se abrazaron.

--Hola Lid, cuánto tiempo, has crecido mucho de la última vez no nos vimos --. Objetó mi padre.