Capitulo 11

3.4K 458 14
                                    

Wei Wuxian, despertó en la madrugada, la habitación estaba a oscuras, pero por la ventana entraban los rayos de la luna.

Esa era la habitación que compartía con Lan Wangji durante su estadía en el reino Jin. Sus ojos captaron la firme espalda de Lan Wangji, el estaba sentado en el piso, sobre un cojín frente a la mesa, si no lo conociera, pensaría que estaba despierto, rompiendo las reglas de Gusu, pero no, debido a que sus reglas estaban tan arraigadas a el, que sin importar dónde o la posición, Lan Zhan se quedaba dormido.

Del otro lado de la mesa, frente a Lan Zhan, Lan SiZhui se encontraba acostado sobre sus brazos en la mesa, ambos, padre e hijo, se veían cansados.

Entonces, Wei Wuxian lo sintió, sus extremidades pesaban, su cabeza daba vueltas y sentía náuseas, además de un dolor en su cuerpo. Soltando un quejido, volvió a acostarse sobre su espalda, el ruido causado por sus movimientos, despertó a Lan Wangji, quien se levantó para auxiliar a su pareja.

— Wei Ying. — en menos de lo que se decía Wuji, Lan Wangji ya estaba a su lado.

— Tranquilo Lan Zhan, solo estoy cansado. — susurro Wei Wuxian tratando de tranquilizar a su pareja.

— ¿Duele? — aunque su rostro no lo demostró, su tono de voz fue preocupado.

— Estoy bien Lan Zhan, no te preocupes. — nuevamente, Wei Ying trato de tranquilizar.

— ¿Seguro? — Lan Wangji acomodo las almohadas detrás de la espalda de Wei Wuxian para que no se esforzará.

— Lan Zhan, ¿A-Yuan? — ambos, miraron a su hijo. — Si duerme en esa posición, le dolerá la espalda si sigue durmiendo así, Lan Zhan, tráelo. — pidió Wei Wuxian moviéndose en la cama para que tanto su hijo como pareja entrarán en la cama.

— Wei Ying debe descansar. —Lan Zhan preocupado, trato de hacer que si pareja cambiará de opinión, regresando el cuerpo de su pareja al centro de la cama.

— Dormiré mejor si tengo a mi esposo e hijo durmiendo conmigo. — Wei Wuxian hizo un berrinche y regreso su cuerpo a la orilla de la cama. — Por favor, Lan Zhan, tráelo. — volvió a pedir suplicante.

— Bien. — una de las grandes debilidades de Lan Zhan, era su esposo y su él le pedía algo con sus ojos llorosos, ¿Quién era el para negarlo?.

— Con cuidado. — Lan Wangji regreso a dónde estaba su hijo y con cuidado, lo levanto del piso para llevarlo a la cama junto con su pareja. — Vamos Lan Zhan, durmamos juntos, los tres. — los tres se acomodaron en la cama, con Lan SiZhui en medio de los dos mayores, quien al sentir el calor corporal de su madre, se acercó aferrándose a su cuerpo.

— Descansa, Wei Ying. — el Lan dio un última caricia a la cabeza de sus dos amores.

— Lan Zhan, te amo. — susurro Wei Wuxian quedando dormido una vez más.

Al día siguiente, los huéspedes del castillo Jin se reunieron en el comedor para recibir el desayuno.

— Papá, mamá. — un joven entro al comedor con una enorme sonrisa y con una comitiva de cultivadores detrás de él.

— Rusong. — Nie GuangYao se levantó de su asiento para recibir a su hijo. — Tardaste. — regaño abrazando a su pequeño retoño.

— Mamá. — reclamo al verse tratado como un pequeño niño por su madre.

— Rusong, toma asiento. — el rey Nie ordenó a su hijo, aunque se le veía severo, solo los más cercanos sabían que era de lo más amoroso con su familia, claro, todo a su modo, ya que por tan amor que les diera, seguía siendo estricto.

Nie Rusong, les dio la indicación a sus seguidores que se podían retirar, el joven siguió a su madre y se sentó su lado izquierdo, saludando silenciosamente a todos los presentes.

— Rey Jin, agradecemos su hospitalidad, pero debemos regresar. — uno de los señores feudales hablo y se levantó de su asiento para marcharse, siendo seguido por varios más.

— Ya que todos estamos reunidos, ¿Qué les parece una celebración en familia por la llagada de A-Xian y A-Yi? — amablemente Jiang Yanli sugirió.

— También Lan Zhan y yo queríamos decirles que nos casaremos, hemos estado juntos desde hace años y aún después de que fui secuestrado, Lan Zhan m espero y ya no queremos perder más tiempo. — anuncio Wei Wuxian tomando la mano de Lan Zhan.

— Cuñado, quería pedirte un último deseo, pero quisiera saber que es lo que querrías a cambio. — Lan Xichen dijo con su típica sonrisa, lo que le dio un mal presentimiento a Jiang Cheng, pero Wei Wuxian no podría evitar burlarse de eso.

— No te preocupes cuñado, si es un último deseo, considéralo mi regalo de bodas. —

— Gracias, A-Xian. — Lan Xichen agradeció tomando la mano de su prometido.

El desayuno concluyo y todos comenzaron a retirarse, los únicos que quedaron fueron los jóvenes, Lan SiZhui, Jin Ling, JingYi y Nie Rusong.

— JingYi, ¿El tío Jiang y el tío Lan te reconocerán como su hijo? — SiZhui rompió el silencio que se estaba volviendo incomodo.

— El día que ellos se casen, me harán su hijo formalmente. — respondió orgulloso.

— ¿Entonces serás el próximo rey de Gusu o Yunmeng? — Rusong se unió a la conversación.

— Al no ser hijo de sangre de ellos, no seré opción para ser rey, lo serán mis hermanos. — contesto JingYi.

— ¿Tu realmente puedes ver el futuro? — pregunto Rusong con curiosidad e incredulidad.

— Bueno, no puedo ver mi propio futuro en específico, pero si el de las demás personas, aunque cuando veo en futuro de los demás, conozco el mío. — JingYi recordó su primera experiencia al ver el futuro, tenía solo doce años cuando despertó asustado, y Wei Wuxian lo había consolado por lo que restaba de la noche hasta que pudiera dormir nuevamente.

— ¿Cómo ves el futuro? — Jin Ling también se unió a la conversación.

— Normalmente es atreves de los sueños, pero otras formas pueden ser con visiones, son menos comunes y más cortas que cuando lo sueñas. — su primer sueño del futuro, le mostró el posible futuro dónde el núcleo de Wei Wuxian había sido destruido, Xue Yang se habría encargado de eso, el también fue quien nombró al temible patriarca Yiling y esparció los rumores, además de entregarle el amuleto del tigre stigio, la energía resentida habría controlado a Wei Ying por completo y se encargaría de matar y destruir todo a su pasó, incluyendo a JingYi.

— ¿Nos has visto en tus sueños? — volvió a preguntar Rusong, para ese momento, ya habían llegado al kiosco del jardín y se estaban acomodando alrededor de JingYi para que les contará.

— Si, en algunas ocasiones. — JingYi se sintió un poco intimidado al tener los tres pares de ojos sobre el, acostumbrado a solo tener la compañía de Wei Wuxian, era extraño tener alrededor suyo a personas más tranquilas que su ge.

— ¿Qué pasa en el futuro? — Jin Ling de repente sintió mucha curiosidad por el futuro, ya sabía que se casaría con Lan Yuan, gobernarían LanLing Jin y obviamente el se encargaría de que su tío Wei le concediera el tener hijos con SiZhui.

— Bueno, Xian-ge siempre me dijo que el futuro que nosotros vemos no está escrito en piedra y está dispuesto a cambios. — explicó JingYi. — En mi primer sueño yo vi a Xian-ge convertirse en el patriarca Yiling y matar todo a su pasó, pero ahora el tío Wei está con sus seres queridos nuevamente y no parece afectado por la energía resentida, así que lo que yo les diga que va a pasar en el futuro puede que no pase tal y como se los diga. — termino su explicación.

— ¿Entonces que importa que puedan ver el futuro si no es el definitivo? — Jin Ling hizo un puchero al comprender lo que JingYi decía.

— No es el definitivo, pero es el más probable. — respondió JingYi.

— ¿Quieres decir que hubo un tiempo en donde había la posibilidad de que mi madre fuera un Dark Fénix? — pregunto SiZhui asustado ante la remota posibilidad.

— La hubo, si, pero ya no, una vez que el amuleto del tigre stigio sea destruido o sellado no habrá esa posibilidad jamás. — JingYi trato de consolarlo.

— Tienes razón. — acepto SiZhui, el sabía que su madre jamás se dejaría convertir en un Dark Fénix, tenía muchas cosas que proteger que no se daría por vencido.

Mientras los adolescentes convivían, una nueva discusión se llevaba a cabo en la oficina del rey Jin, ya que el salón del trabajo había quedó sin una pared y muy expuesto a qué los sirvientes los escucharán, así que se habían reunido en la oficina del rey para tratar el tema del amuleto del tigre stigio.

— Debe ser destruido. — rugió el señor feudal Yao.

— El maestro Wei Wuxian ya lo intento una vez y murió por eso. — intervino el rey Lan Xichen.

— Debe de haber una forma de hacerlo. — volvió a rugir el señor Yao.

— Wei Wuxian se debe hacer cargo, debe tomar la responsabilidad de sus actos y consecuencias. — se escucho del otro lado de la habitación, los demás señores feudales comenzaron a hablar al mismo tiempo dando sus opiniones.

— Silencio. — decreto Jin ZiXuan al sentir su cabeza doler.

— Tienen razón, debe de haber una forma, pero no toda la responsabilidad recae sobre Wei Wuxian, ¿O es que ya no recuerdan porque fue creado el amuleto del tigre stigio? — todos quedaron callados ante lo dicho por Jiang Fengmian.

— Eso no importa ahora, rey Jiang, el amuleto ahora mismo es un peligro. — el señor Yao volvió a alzar su voz.

— ¿Porque no? — la voz de Nie HuangSang se escucho tímida sobre las demás, al verse el centro de atención se escondió detrás de abanico.

— Continúa, A-Sang. — pidió el siempre amable Lan Xichen.
— Bueno, ¿Por qué no dividirlo en cinco y que cada uno se sellado por un reino y uno por Wei-xiong? — su tono de voz fue disminuyendo cada vez más hasta casi ser un susurro.

— Esa una buena idea. — comento Nie GuangYao. — Así nadie podrá conseguir el amuleto completo y tampoco ningún reino tendrá mayor poder que los demás. — agrego.

— A-Sang y A-Yao tienen razón. — acepto Nie Mingjue.

— Estoy de acuerdo. — comento Lan Xichen.

— Igual yo. — Jin ZiXuan.

— Nosotros también. — respondió Madam Yu en lugar de su esposo. Ante lo dicho por los cuatro reyes, ninguno de los señores feudales pudo negarse.

— Maestro Wei, ¿Puede encargarse de separar el amuleto y sellarlo para llevarlo a cada reino respectivamente? — Wei Wuxian afirmó a la pregunta de Lan Xichen con una sonrisa.

— ¿Cuánto tiempo te tomara? — pregunto Jiang Cheng.

— No será mucho, si comienzo ahora mismo, para mañana a esta hora estará separado. — con tono dudoso para terminar con un tono risueño.

— En ese caso, mañana cuándo termines de separar el amuleto, y sea entregado a cada reino, nos retiramos para resguardar nuestros fragmentos. — ordenó Jiang Fengmian.

Las personas fueron saliendo de la oficina hasta quedar solo el rey y sus más allegados, una vez solos, el rey Jin le entrego el amuleto a Wei Wuxian, quien también se retiró con Lan Wangji para comenzar a separar el amuleto.

Esa noche, Wei Wuxian y Lan Wangji no se presentaron a la cena, y ordenaron sus platos a su habitación.

Para el amanecer del siguiente día, Wei Wuxian y Lan Wangji tampoco se presentaron al desayuno. Los adolescentes parecían los más preocupados por esto, pues no los habían visto ya en varias horas.

Para cuando el sol ya estaba por llegar a las montañas para ocultarse, por fin ambos aparecieron. Cada uno cargaba con varias bolsas Qiankun.

— Lamentamos la demora, pero fue un poco más difícil de lo que pensé. — Wei Wuxian se disculpo una vez que estuvieron con los demás.

— Wei-xiong, ¿Esas bolsas son…? — Nie HuangSang dejo su pregunta al aire, pero centro la atención de todos en las bolsas.

— Aquí guardamos los fragmentos para que sean más fácil de transportar, y tal vez también de purificar. — respondió entregando a cada rey una bolsa, Wei Ying le dio una a Nie Mingjue, Jin ZiXuan y Jiang Fengmian, mientras que las que traía Lan Zhan, una seria para el reino Gusu Lan y la otra sería guardada en el “Palacio de los deseos”.

— ¿Se quedarán o se marcharán? — pregunto Jin Ling a sus tíos y primos.

— Mañana, hoy, Shijie propuso hacer una celebración por nuestra reunión y recién victoria. — respondió Wei Wuxian. Jin Ling y Lan SiZhui solo se miraron y se dedicaron dulces sonrisas, lo cual fue visto por los padres de ambos.

— Que bueno que lo recordaste, tenía planeado que si no salías de esa habitación iría por ti y te rompería las piernas para sacarte. — amenazó Jiang Cheng ignorando los evidentes coqueteos de sus sobrinos.

— Yo sé que te preocupas por mi Shimei. — se burló Wei Wuxian.
— ¿A quien llamas Shimei? — dijo furioso Jiang Cheng.

— A-Xian, A-Cheng, no peleen. — intervino la reina Jin.

— Lo que Shijie ordene. — Wei Wuxian sonrió como solo el podía hacerlo.

La cena también se convirtió en la celebración que habían planeado, también era una despedida, pues cada rey y señor feudal regresaría a su hogar, incluso Wei Ying con su familia, Lan Zhan y Lan SiZhui, irían a Yunmeng, para llevar su fragmento al castillo hogar de Wei Wuxian.

El vino no pudo faltar, varios trataron de hacer que Wei Wuxian les concediera deseos por el simple hecho de rellenar su taza y aprovechando su “ briagues ”. Pero solo los más cercanos sabían que Wei Wuxian tenía una tolerancia al alcohol tan alta como los cielos y las estrellas.

Antes de las nueve, los Lan comenzaron a retirarse de la celebración, obviamente no se pudo evitar que Lan Zhan arrastrará a Wei Wuxian de regreso a su habitación, aunque solo ellos sabían que harían más que solo dormir.

Al amanecer del día siguiente, muchos se lamentaba el haber bebido junto a Wei Wuxian, aunque cuando lo vieron a las nueve de la mañana en el desayuno, estaba tan fresco como una lechuga, aunque también se le notaba un poco cansado, pues se quejaba de dolor muscular.

Al terminar el desayuno, comenzaron las despedidas y las promesas de volverse a encontrar, la siguiente vez en la boda de Lan Xichen y Jiang Cheng.

— Lan Zhan, ¿Qué pasó con el castillo? — pregunto Wei Ying montado en su espada a un lado de Lan Zhan.

— Vacío. — respondió sin apartar la mirada del frente.

— ¿Lo vaciaron? — pregunto sorprendido, Wei Wuxian sabía que el castillo, que alguna vez fue llamado “ el castillo de los deseos “ sería registrado y se llevarían sus pergaminos, dónde el plasmó los deseos que cumplió y la historia de los fénix originales y el primer Dark Fénix, también por eso se llevó consigo su reserva de licor.

— Después de que desapareciste, los cuatro reyes fueron al castillo y como no te encontraron, saquearon todo para ser revisado y protegido de posibles ladrones de tesoros. — interrumpió Lan SiZhui al saber que su padre no le diría toda la información a su madre, solo escuetas palabras.

— ¿Todo? — volvió a preguntar, pues en cierta parte del castillo, muy oculta, tenia su colección de arte erótica, la cual fue compartida con Nie HuainSang.

— Todo. — SiZhui le sonrió amablemente a su madre.

Al llegar a Lotus Pier, los tres se separaron de la guardia de Yunmeng, que acompañaba a los reyes Jiang y su heredero.

Al llegar, el lugar se veía abandonado y solitario.

— Poco después de que se confirmo tu desaparición, se le comenzó a llamar “ El museo de los deseos y el silencio” — comento Lan SiZhui mientras caminada a un lado de su madre.

— “El museo de los deseos y el silencio” — repitió Wei Wuxian llegando a la enorme puerta del castillo. — Me gusta. — con ambas manos, empujó la pesada puerta y está se abrió mostrando un salón principal vacío y oscuro.

— Ha paso mucho tiempo. — susurro Lan SiZhui, pero debido al eco en el lugar se escuchó claramente.

— Trece años. — susurro Lan Zhan.

— Ha pasado demasiado tiempo. — Wei Wuxian se colocó en el centro del salón y expandiendo su energía espiritual, inundó las paredes que parecían retornar a la vida, los colores opacos regresaron a ser brillantes y vivaces.

— Wow. — exclamó Lan SiZhui al ver el inmenso poder de su madre.

— Este, puede ser nuestro hogar de ahora en adelante, si lo desean. — comento Wei Wuxian atrayendo la atención de los Lan a su persona.

— Solo si está Wei Ying. — acepto Lan Zhan.

— Si es con ustedes, incluso si es en una cueva, cualquier lugar en mi hogar. — respondió Lan SiZhui abrazando a sus padres.

— Este será un nuevo comienzo. — comento Wei Wuxian aún dentro del abrazo con Lan Zhan y Lan SiZhui.

El museo de los deseos y el silencioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora