Enséñame Lo Que Es El amor 2 - Juliantina (Terminada)

08) DESAYUNO

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V: Y si tenemos sexo una vez más?-dijo con una sonrisa divertida-Ya sabes...para calmar los nervios.

J: Claro, "calmar los nervios"-dije riendo.

V: Deberías considerarlo, no quiero que nos vean teeensas o algo así-dijo intentando crear un punto.

J: Cariño, te ves más relajada que Snoop Dog, no necesitas más sexo para eso-reí-Ya vamos tarde porque interrumpiste mi proceso de vestido.

V: Hey, hey! No es mi culpa que me provoques de esa manera-se defendió.

J: Te pedí que me ayudaras con el cierre de mi vestido!-reclamé moviendo las manos-No dije "sí Valentina, quítame el vestido y hazme tuya en la cama".

V: Eso es lo que escuché-dijo apuntándome con el dedo índice-Justo eso.

J: Eres una idiota-dije negando con la cabeza mientras reía.

V: Así me amas-dijo enchinando los ojos-Acéptalo.

J: Sí, así te amo-acepté.

Sonrió y entrelazó su mano libre con la mía. Estábamos a dos cuadras de la casa de sus padres y era bastante raro que Valentina condujera lento, pero ahora lo hacía, teníamos un poco de miedo. Suspiré al ver la casa acercándose cada vez más. Aparcó y me miró unos segundos.

V: Lista?-preguntó tomando aire.

J: No, pero tenemos que bajar de todas formas-contesté riendo.

Soltó esa risilla hermosa que tiene y asintió. Desabrochamos nuestros cinturones, y bajamos. Tocó el timbre. Las múltiples voces podían escucharse desde donde estábamos. Parecían estar congeniando.

Lu: Ya llegó la pareja feliz!-dijo la madre de mi novia.

Reí por lo ridículo que sonaba y esperé a que dejara de abrazar a Valentina para acercarme y saludar. Mi ojiazul entró un poco y esperó por mí. Tomó mi mano y entramos a la sala, donde estaban todos desparramados por el lugar. Fuimos saludando uno por uno sin soltarnos, lo cual me quitaba un poco la ansiedad.

Lu: Ya que llegaron podemos desayunar!-dijo mi suegra.

Todos se pusieron de pie, hambrientos. Pasamos al patio y había una mesa larga cruzando este. Tenía de todo, parecía el bufett de un hotel costoso. Había fruta de todos los colores, sandwiches de jamón y queso, jugo de naranja, café, en sí, todo lo que armaría el desayuno perfecto.

V: Se lucieron eh?-comentó Valentina.

Sus padres rieron y contestaron algo que no alcance a escuchar. Me paré al lado de mi hermana y le sonreí.

J: Como va todo?-pregunté tomando un plato.

S: Bien, supongo-encogió sus hombros-Son muy agradables.

No sonaba muy convencida. Valentina me miraba desde su lugar y le sonreí. Me sonrió de la misma manera y continuó conversando con su madre.

S: Él no tiene ese brillo-dijo de la nada.

La miré confundida. No parecía inmutarse, continuaba sirviéndose fresas.

S: Cuando me mira-siguió.

Me estoy perdiendo más. Tomó un vaso y se sirvió jugo de naranja. Caminé detrás de ella mientras me servía.

J: No te estoy entendiendo-dije buscando su mirada.