Capítulo 19

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Bree intentó conseguir que Caleb la mirara aunque tan solo fuera durante unos segundos para que pudiera ver la expresión de horror que sus ojos transmitían

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Bree intentó conseguir que Caleb la mirara aunque tan solo fuera durante unos segundos para que pudiera ver la expresión de horror que sus ojos transmitían. Siempre había tenido miedo de que Paige descubriera como verdaderamente había empezado todo y cabía la posibilidad de que el motivo de su ruptura fuera simplemente aquel.


Paige se había convertido en una de sus personas favoritas y la necesitaba. Las dos se necesitaban la una a la otra. No para sobrevivir, sino para hacer su vida un poquito mejor y más soportable. 

—¿Caleb? —preguntó Paige, intentando sacarle la máxima información posible.

—Bueno, al principio me gustabas tú. Lo sé, es de locos pero la cuestión es que le pedí a Bree que se hiciera amiga tuya para que yo pudiera tener más contacto contigo.

Paige permaneció inmobil durante unos segundos y finalmente bajó la mirada. Con voz temblorosa, consiguió decir:

—Bree... ¿Puedo hablar contigo en privado?

Bree le dirigió una mirada cargada de odio a Caleb y este entendió que acababa de meter la pata hasta el fondo.

Las dos chicas se levantaron y aunque Bree prefirió hablarlo en su habitación, Paige abrió la puerta de la casa y las dos quedaron expuestas al frío exterior.

—Desde el principio he pensado que te acercaste a mí no por la razón de que tuvieras problemas con las matemáticas, sino porque te gustaba o algo así y...

—Paige...

—¡Déjame terminar! Pensar que todo esto ocurrió porque quisiste aprovecharte de nuestra amistad... ¿Sabes lo que siento ahora mismo?

—Puedo explicarlo todo, no hace falta enfadarse y mucho menos ponerse tan dramática.

—¿Dramá...? ¿Sabes lo que siento ahora mismo?

Bree permaneció en silencio, esperando la respuesta.

—Arrepentimiento.

Jamás hubiera imaginado que una sola palabra podría causarle tanto daño. Resonaba en su cabeza sin cesar y su corazón parecía hundirse cada vez más. Sentía como si la acabaran de apuñalar por todos los sitios y ni siquiera se atrevió a mirar a Paige a los ojos.

—¿Te arrepientes de... nosotras?

Un sollozo escapó de la garganta de Paige.

—Lo siento, Bree, pero esto es demasiada información en una sola noche. Tengo que estar sola y pensar. Tengo que marcharme.

Acto seguido, Paige empezó a correr en dirección al parque y Bree la perdió de vista con demasiada rapidez.

—¡Paige, espera!

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