v. la trampa de excella gionne

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NUEVOS DIOSES,
capitulo cinco: la trampa de excella gionne!


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          RICARDO IRVING NO MENTÍA EN LO QUE LES HABÍA DICHO ANTES DE MORIR, tratándose de una sólida declaración que impulsó al trío de agentes de la Alianza a continuar adelante en aquel camino desconocido donde aún tenían la gran incógnita sobre quién era la persona que verdaderamente estaba detrás de todo esto. El bastardo se descomponía lentamente una vez que Joy finalmente lo había matado, dejando más preguntas en el aire que respuestas — el resto de los Majinis no habían vuelto a aparecer. Luego de deshacerse del cadáver de Irving, los agentes decidieron ir hacia esas cuevas, buscando comprobar si lo que decía era cierto. El bote que utilizó la persona que ayudó a Irving a escapar de las minas cercanas de Kijuju se encontraba aparcado en aquel lugar, abandonado, pero con movimiento reciente. Todo daba indicio a que estaban encaminándose por el camino correcto y mientras más avanzaban, más le ponían un precio a sus vidas.

          Josh los miró desde la embarcación, Zella dormida a un lado.

          —¿De verdad quieren seguir hasta el final?—les preguntó el africano.

          —Sí, eso ya está más que claro—señaló Chris asintiendo, acomodando su lanzagranadas al hombro.

          —¿Irás con ellos, Sheva?

          —No solo se trata de Jill, sino también del Proyecto Uroboros—añadió Alomar al lado de Joy—. Tenemos que llegar hasta el final. No voy a dejarlos.

          —Supongo que no puedo hacer nada para detenerlos—concluyó Stone.

          Joy se cruzó de brazos—No, no puedes.

          El capitán del equipo Delta soltó una risotada entre dientes, negando con la cabeza—Llamaré al Cuartel General para cancelar la orden de retirada. Me llevaré a Zella a un lugar seguro donde puedan mantenerla a salvo y trataré de conseguirles refuerzos—dirigió su mirada hacia Sheva—. Tafadhali usijaribu kujiua (Por favor, no intentes que te maten).

          —Wewe mtunze Zella, nitamtunza msichana wako (Tú cuida de Zella, yo cuidaré de tu niña)—le dijo Joy y Sheva le miró con una ceja alzada.

          El camino para atravesar las cuevas fue más que incómodo, además de ser estrepitoso, como si uno entrase a un laberinto para quedarse atrapado y no salir más. Las trampas, los rompecabezas, había veces que ella se sentía dentro de una puta película de Indiana Jones — escapando del peligro, columpiándose por dianas, pateando traseros de infectados y simplemente sobreviviendo al peligro (faltaba un látigo, pero ella creyó que le quitaría seriedad a la situación). Chris y Sheva se movían en igual sintonía como ella, la última finalmente estando a la altura que ellos, cosa que Joy sabía que era más que capaz de lograr. El trío de agentes avanzó hasta toparse con una gran cornucopia subterránea que era iluminada por la luz del día, de manera casi completa y dando a ver a un campo de flores que se encontraban fuertes y bien florecidas.

MORTALITY ━━ Chris Redfield ²Donde viven las historias. Descúbrelo ahora