Una gran responsabilidad

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Pov Omnisciente.

Burbujas, era todo lo que podía escuchar en la oscura humedad, hubo ruidos y de un momento a otro pudo sentir como todo se sacudía, las burbujas dejaron de fluir y se ahogaba en el espeso líquido.

Escuchó voces de las cuales no entendía ni una palabra, solo supo que despertó cuando su cápsula cayó de gran altura.

Abrió los ojos atragantandose y siendo tan inconsciente como cualquier smeet lo estaría en sus primeras semanas, en cuanto logró expulsar el líquido comenzó a llorar.

—¡Estamos bajó ataque! ¿Ya aseguraron las cápsulas? —Preguntaba una voz femenina, angustiada.

—Si más alta Miyuki, pero-

Miyuki: Asegúrese de trasladarlos con el piloto automático al área segura, avisen a todas las niñeras.

Miles de irkens corrían en desesperación, protegiéndose unos a otros y yendo al área segura, aliviados de que estaban todos juntos.

Red: ¡Purple apúrate! —Exclamó buscándolo con la mirada. —Ya no hay más rezagados, tenemos que asistir las cunas de los smeets. —Dijo cuando vió que el de violeta se acercaba con la mirada pasmada y lo que era el mantel de su traje envuelto en algo entre sus brazos.

Purple: R-Red... —Habló acercándose rápidamente, el mencionado le puso la mano en la espalda y juntos avanzaron cuidándose entre ellos.

Una vez llegaron a su área asignada Purple le mostró al pequeño smeet que tenía en brazos.

Red: Oh por irk... —Dijo quitándose los guantes. —¿Dónde lo encontraste? ¿Que clase de niñera lo dejaría a la deriva?

Purple: Red, el acaba de nacer, lo encontré entre los vidrios de su cápsula... Probablemente por el ataque... —Dijo preocupado, arrullando al smeet entre sus brazos luego de haberle tratado las heridas, el mandil estaba manchado con algo de su sangre.

Red: Santos altos, es muy pequeño... —Entonó preocupado. —¿Crees que estará bien?

Purple: Debemos decírselo a la más alta Miyuki, tal vez si ella me lo permite yo podría ser su niñera. —Dijo alzando al pequeño, con una suave sonrisa.

El smeet comenzó a llorar y las antenas de ambos se tensaron.

Purple: Ahhh. —Entonó levantándose y apresurandose a buscar en las alacenas. —¿Dónde está el sugar tape?

Red: Por aquí, lo guardaste en el contenedor, ¿Ves? —Tomó la cinta y hechó aproximadamente 5 cm de esta en una especie de biberón.

Purple: ¿Y la glulactosa? —Entonces sonrió, recordando que la había dejado en el frigorífico.

Red: ¡ESPERA! —Exclamó deteniendolo, el pequeño frente a el lloraba más fuerte y su compañero se mostró preocupado. —No lo acerques al frío.

Purple: Oh, cierto jeje, lo siento. —Dijo entregandole al pequeño.

Red: Am, a-alejalo, sacaré la glulactosa. —Una vez Purple se alejó sacó la leche, la hechó en el biberón y la cinta comenzó a generar espuma al contacto, calentándose, el de rojo mezcló bien, tapó y le entregó el biberón a Purple.

El pequeño dejó de llorar mientras era alimentado y estuvo bastante tranquilo hasta que se gastó la glulactosa, hecho eso ambos niñeros siguieron cuidando de el y por el momento solo lo mantuvieron cubierto con la suave tela, abrigandolo con cuidado.

Tu, mi Dulzura | ZADR | Lovebug AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora