Peaky Blinders - One Shots

Michael Gray

La secretaria

Michael Gray- Lectora

Llevabas un par de meses trabajando para Thomas Shelby.
Después de que el puesto de secretaria quedase libre pues Lizzie tenia que cuidar a su bebe, tu no perdiste tiempo y te postulaste para el puesto sin perder tiempo.

Te dieron el trabajo y una muy buena paga, no tenias nada de que quejarte, sin embargo había una cosa, muy pequeña, casi insignificante pero te hacia sentir incomoda, en cada reunión de la compañía, Michael el primo de Tommy, tenias que lidiar con aquellas miradas furtivas que te lanzaba cada que estaba cerca.
Michael era tu ex novio, tu y el no terminaron muy bien que digamos, trabajar con el te incomodaba.

En fin, fuera de eso era un gran trabajo y no lo dejarías por nada ni nadie.

Era un día bastante nublado, una gran reunión en la casa de Tommy, sabias que era para celebrar un nuevo trato que habían cerrado con unos Irlandeses, la compañía seguía subiendo como espuma.
Los invitados, solo familia y los nuevos socios.

Llegaste mucho antes que los demás, te aburriste rápidamente pues no había nadie con quien charlar, Tommy hablaba y hablaba con sus nuevos socios sin prestarte atención.

Saliste silenciosamente y caminaste al gran jardín, amabas la vista que tenia Thomas desde su casa, aspirabas a tener un hogar así de lindo, sin embargo parecía imposible, si bien tu sueldo era bastante bueno y ahorrabas bastante , no alcanzarías a comprar una casa de esa magnitud, al menos no sola.
Una voz te saco de tus pensamientos

-Una magnifica vista cierto?- Era uno de los irlandeses, no recordabas su nombre.

-Ah, claro, Tommy es afortunado de tener semejante casa- mencionaste mirando al horizonte.

-Y semejante mujer- Dijo con una sonrisa de oreja a oreja.

Te sonrojaste ante sus palabras.

-Oh dios no- Reíste levemente- solo soy su secretaria.

-Vaya, no lo sabia, disculpe mi torpeza-

-No se preocupe-

Así comenzó una charla que duro cerca de una hora, el tipo el cual ahora sabias se llamaba Sheamus tenia un excelente sentido del humor y era todo un caballero, su charla hubiese durado más si no hubiese sido porque otros de los socios salio y le dijo a Sheamus que su padre lo estaba buscando.

-Vienes- pregunto

-En un momento voy- respondiste suavemente

-Bien-

Te quedaste unos minutos mas apreciando la vista, antes de caminar hacia la casa, sin embargo antes de que pudieses cruzar el umbral de la puerta una mano sujeto tu muñeca fuertemente, alguien te empujó hacia la pared y acorralo tu cuerpo, no podías ver el rostro de la persona, pero sabias quien era, te sorprendiste a ti misma reconociendo aquella fragancia.

-Que rayos quieres Michael?-

-Buenas tardes, como estas, yo bien, un placer verte de nuevo- hablo sarcásticamente.

-Que se te ofrece Michael- respondiste con falsa amabilidad

-Quien era el maldito hombre con el que hablabas- rugió impaciente.

-Que te importa idiota- trataste de empujarlo pero no cedió.

-Me gusta cuando te retuerces entre mis brazos-

Aunque no te guste admitirlo esas palabras encendieron algo dentro de ti, algo que creías extinto.

-Déjame-

-Te soltaré con una condición, un beso.

-Aja y seras muy afortunado con un beso, cual es el truco?- preguntaste

-No hay truco cariño, vamos se que quieres.

Lo meditaste un segundo, el tenia razón tu también lo deseabas.

Lo tomaste por el cuello y lo besaste, creíste que seria un pico pero te sorprendió tomándote por el trasero y acercándote mas a el devorando tus labios en un beso que duro bastante y a medida que profundizaban el subía tu falda. Te separaste de golpe, aprovechaste su distracción, te soltaste de su agarre y huiste del lugar.

....

Había pasado una semana desde aquel beso, habías evitado a Michael a toda costa, incluso Tommy pregunto que que te pasaba, pero lo evadiste diciendo que no era nada importante.

Sin embargo justo ese día tenias una reunión con Michael y Tommy para hablar acerca de la empresa.

Cuando llegaste a la oficina de Tommy, Michael ya se encontraba sentado fumando un cigarrillo te sentaste rápidamente y comenzó la reunión.

Tratabas de poner atención a lo que Thomas decía pero era casi imposible, te distraías mirando a tu primer amor, su forma de hablar, cada que le daba una calada a su cigarrillo, la forma de expulsar el humo.

Negaste y trataste de poner atención.

La reunión concluyo y tu saliste de la oficina, Michael venia detrás tuyo.

- Entonces vamos a comer o quieres ir directo a mi cama?- Te erizaste al escuchar sus palabras

- Que te hace pensar que quiero hacer cualquiera de esas 2 cosas-

-Tu mirada-

-No se de que hablas- Cortaste y comenzaste a caminar rápido hacia la salida.

Antes de que cruzaras la puerta el tomo tu mano y salio contigo a fuera, no te soltaste de su agarre, te gustaba y esta vez no ibas a negarlo,  te había pillado viéndolo, y no tenias nada que perder.

Caminaron por la acera, el hacia chistes y tu reías, parecían una pareja enamorada, las chicas los miraba con envidia, de pronto se acerco a tu oído y te susurro

-Yo creo que mejor vamos directo a mi casa- Reíste, pero asentiste, tu tampoco podías esperar mas.

Fue el comienzo en una bella historia, su historia.