Mi querida caperucita

cap 4

Al día siguiente, mucho antes de que el Alba se alzara, yo ya estaba dando vueltas en mi hamaca sin poder conciliar el sueño un segundos más.

-Natsu, deja de moverte..

Me levante soltando un gruñido, no, ahora si que no podía dormir. Estaba ansioso por ver a Lucy...aparte tenía muchas cosas en las que pensar, por ejemplo: Zeref.

-sigue durmiendo Happy, solo voy a darme un baño y vuelvo.

Le acaricie la cabeza con cariño mientras veía como su pequeño cuerpo se hacía bolita del frío, automáticamente tome una manta y lo arrope con una sonrisa en mi cara; apenas salí, el aire fresco de la mañana me pego en mis fosas nasales al igual que el sonido del agua llegó a mis orejas que se agudizaron de inmediato.

-hoy va a ser un gran día! Estoy encendido!

Luego de correr entre los árboles hasta llegar al lago, el cual estaba  en medio de todo un pequeño prado, los primeros rayos del sol se filtraron por la cima de las montañas haciendo que el agua se transformara en hermosos cristales rojizos, iba a cambiarme cuando del otro lado del lago una figura se comenzó a divisar, pensando que era Lucy salte con fuerza al suelo pero me quedé de piedra al ver todo lo contrario.

-qué haces aquí?

No pude evitar soltar un gruñido ante mi pregunta, no es que la odiara, simplemente no tolero su aroma.

-este lago es para purificarse las Mikos, un Shifter no puede estar aquí.

Nuevamente el viento soplo con fuerza, moviendo los cabellos cortos de aquella Miko que se encontraba con su delgada yukata y en sus manos una pequeña cubeta de madera con una toalla.

-tsk, puedes que crees? No caere en tu mentira, desde que tengo memoria he venido aquí y no me ha pasado nada!

Me quité mis botas con fuerza y arremangue mi pantalón caminando con decisión hacia el agua, le mostraría a esa Miko tonta que era mucho más inteligente que ella. Apenas mi pie tocó el agua una descarga eléctrica hizo que lo sacará con  rapidez y por ende cayera al suelo.

-te lo dije.

Gruñi mirándola con ira, esta tipa puso algo, lo se.

-bruja.

-cuando los rayos del Sol tocan el agua, es cuando más pura esta. Un ser como tu se purificaria de inmediato.

Me levante de golpe y me coloque las botas sin importar el escozor de mi pies, asegure mi bufanda para luego fijar mis ojos en ella quien no tenía ni una maldita reacción. Es que acaso, todas las Miko son tan frías como un árbol?

-es qué nunca sonríes!? Es odioso verte así!

-no daré mi sonrisa a alguien tan sucio como tú.

-como si a mi me importará...ojala te ahogues aquí, me largo.

Mire el árbol más cercano y lancé cayendo con gracia sobre una de sus ramas, estaba por irme cuando escuche su voz en susurro..

-de veras...he olvidado como sonreír?

La curiosidad me ganó y mire entre las ramas, aquella Miko se encontraba viendo su reflejo en el agua, gire los ojos.

-vamos Natsu! No hay tiempo que perder, la cascada esta cerca de la casa de Anna, te das un baño rapido y corres hacia la entrada de la casa de Lucy.

Después de hacer todo ese recorrido, finalmente estaba limpio, perfumado y arreglado para ver a mi rubia favorita, al llegar frente a la casa de Lucy pude detectar que el aroma del lugar había cambiado. No había el aroma cálido y lleno de alegría que desprendía el hogar...sino más bien había un silencio abrumador, como si alguien hubiera muerto...no era Lucy, escuchaba sus respiraciones y el latir de su corazón normal, como si aún durmiera.