🎭 XIII: Lágrimas de ángel

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«Si de todas formas voy a violar la norma de alargar la vida de Misa, al menos escribiré todos los nombres que crea necesarios en esos 40 segundos», pensó Rem, mientas atravesaba la pared.

– Corinna, Dear –la tomó por los hombros.– Comprendo lo de tu hermano, pero no puedes arriesgarte así...No creo que fuese lo que él quisiera.

– ...Mi hermano era mi única familia, y ya no está. No me preocupa esto –sonrió.

– Pero...

La letra W apareció en la computadora delante de L, pero nadie habló.

– ¿Qué pasa, Watari...? ¿Watari?

«Rem, no esperaba que lo fueses a hacer tan bien», pensó Light, sonriendo de lado con malicia.

Todas las pantallas se pusieron en blanco, con un cartel en ellas:


All data deletion


Todos se sorprendieron.

– ¿Todos los datos borrados? ¿Qué significa?

– Le di instrucciones a Watari de que borrase toda la información que teníamos si preveía que algo malo le iba a pasar...

– ¿Algo malo...?

– Él...no puede haber...

– ¡¿Dónde está la shinigami?!

– No está...La shinigami no está...

«Si Watari ha muerto...Amane no conocía su cara...Yagami Light, ¿Qué has hecho cuando saliste a verla hace un momento...? Pero nadie conocía el nombre de Watari...Sólo ha podido ser la shinigami...», pensó L.

– Escúchenme todos, el shinigami acaba...de...

El detective comenzó a temblar, lo que llamó la atención de todos.

– ¿Eh? ¿Qué te pasa, Ryuzaki?

L comenzó a caer de la silla, sorprendiendo y asustando a todos. Light se abalanzó hacia él, para sostenerlo antes de que su cuerpo tocase el suelo. Todos exclamaron sorpresa.

– ¡Boss!

– ¡Honey!

– ¿Ryuzaki?

«Yagami Light...Así que...yo...no estaba...equivocado...pero...yo...», pensó, al ver la maliciosa sonrisa del castaño.

L cerró sus ojos, cuando su corazón dejó de latir.

– ¡¡Ryuzaki!! ¡¡Oye, Ryuzaki!!

Corinna jadeó, llevando una mano a su pecho.

– Dear... ¡Dear, ¿Qué sucede?! –preguntó Tn preocupada, ayudándola a sostenerse.

– T-Tn... –la miró.

– ¿Dear...?

La chica cerró los ojos y cayó. Tn se apresuró a sostenerla, cayendo de rodillas con el peso de ella y el suyo propio.

– ¡¿Qué les pasa?!

– ¿Qué sucede...?

Light comenzó a gritar con horror. Aizawa gritó también.

– ¿...Aizawa?

– No...Noso... –cayó al suelo, asustado.

– ¡Nosotros somos los siguientes! ¡Watari, Ryuzaki, Corinna, y ahora nosotros...!

Duality 🎭 L LawlietDonde viven las historias. Descúbrelo ahora