Era una noche silenciosa, iluminada por nada más que una tenue luz de luna que escapaba entre las cortinas de la habitación de uno de los chicos; estaban acostados abrazándose, la cabeza del rubio reposaba en el torso desnudo de su amante, era difícil diferenciar a quien le pertenecía cada par de piernas, no era la primera vez que estaban solo así en un silencio cómodo, tampoco era la primera vez que tenían sexo pero esa noche fue algo más, Kirishima había estado fuera con Fat gum casi un mes, así que se añoraron demasiado él uno al otro.
– ¿Estás despierto? –preguntó el pelirrojo a lo que recibió algo parecido a un gruñido mientras su novio se acomodaba más en su pecho. – ¿Crees en Dios?
– ¿A qué viene eso ahora? –contesto la pregunta con otra.
–Uno de los héroes con el que trabaje tenía un rosario, dijo que este es el tipo de trabajo en el que hay que tener fe, yo mmm sí creo pero no tanto, así que quería saber si tú creías.
–Tiene lógica –dijo apoyando su mano en el pecho contrarío. –Pero yo creo que no... Alguien me dijo una vez que eso debía ser algo liberador pero en realidad es un poco solitario, por eso leí un poco en que creía otra gente.
– ¿Ah sí? Y... ¿Qué encontraste?
–Hay muchos mitos de la muerte.
–A todos nos da miedo morir –soltó una pequeña risa como era habitual. –Aunque no sean héroes, así que...
–También del amor, hay muchos dioses y muchas formas de explicar las cosas, creo que los Dioses solo son eso –la conversación parecía tornarse más y más seria. –No me gusta la fe cristiana para ser sincero.
–Wow eso es inesperado –el pelirrojo no sabía que contestar ante la ola de palabras sinceras de su novio. – ¿Y eso porque es? –sabía que Katsuki debía tener una buena razón para que algo le disgustase, siempre era así o al menos eso creía.
–Solo estar así contigo para esos idiotas está mal.
–Jajaja ya veo –ninguno de los dos podía decir las palabras que ambos pensaron "Como amar tanto a alguien puede estar mal" – ¿Hay algo en lo que creas?
Era una pregunta "inocente" pero dejo un largo y tendido silencio en el que ambos pensaron por un tiempo, mientras estiraba su mano hacía el techo el rubio comenzó a hablar.
–Hace mucho existieron humanos de cuatro brazos, cuatro piernas, cuatro ojos... Ellos eran tan perfectos y poderosos que los Dioses los partieron por la mitad por temor, desde entonces los humanos buscan a su otra mitad para volver a estar completos.
–Eso es tan... ¿De dónde es? –no pudo decir que le parecía hermoso pero Bakugo entendió a la perfección lo que trataba de decir.
–Solo es mitología, un cuento.
Eijiro movió sus piernas con poco éxito pues se encontraban enredadas con las de su acompañante, como si hubiese entendido algo empujo a Bakugo a la cama para quedar sobre de él una vez más.
–Somos nosotros ahora –dijo feliz.
Bakugo lentamente tomó el rostro de su persona más preciada entre sus manos, entendía la expresión de "sostener el mundo entre tus manos" lo entendía a la perfección en ese momento, así que decidió besar a aquel "mundo" ellos estaban llenos de fortuna pues ya se habían encontrado, su otra perfecta mitad.
N/A: Me gustó mucho como quedó este día, el mito del que hablan son los androginos, tenía muchas ganas de hacer este día porque me encantá la mitología, primero pensé en poner a Hotu (Díosa del amor egipcía) o a la diosa de las flores azteca porque es la primera de nacer de dos Dioses masculinos, pero al final agarre mi libro del banquete y leyendo la parte del tipo de amor salió esto, gracias por leer.