Capítulo 5

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LOS AMIGOS DE MI PROMETIDO

Aitana

Estar en esta situación es algo que no me había imaginado nunca, ni siquiera lo hubiese pensado

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Estar en esta situación es algo que no me había imaginado nunca, ni siquiera lo hubiese pensado. Siempre he sido una persona muy sana y el hecho de que quizás no pueda tener hijos es algo que me agobia muchísimo.

Desde que tengo uso de razón he querido ser mamá, poder tener hijos y darles todo, darle buena educación, quererlos y adorarlos con mi vida.

Y desde que conocí a Cha-min, desde que estamos en esta relación, no hemos anhelado algo más que esto, más que ser padres y es tan especial compartir el mismo sueño, el mismo anhelo con la persona que amas.

Salgo de la bañera, me doy una ducha y voy al vestidor, me pongo ropa interior y una bata de baño, no tengo ánimos de cambiarme y por ahora, la única visita que espero es la de mi novio.

Mi pelo lo dejo suelto y finalmente, limpio todo, tomo mi celular y la botella de vino, apago la música y bajo a la sala de estar, tomo la botella de whisky y me dirijo a la cocina. Allí, pongo la botella de whisky en su lugar y la botella vacía la pongo en el basurero.

Decido hacer algo de comer, aunque no tenga mucho apetito, miro los manos y me asusto, ¡Tengo mis manos como pasas! Miro la hora en mi celular, carajo, son las 6 de la tarde. Más bien, debo hacer algo de cenar, si Min sabe que no he comido en todo el día, ¡La regañada que me dará!

Decido hacer espaguetis y eso es lo que hago, en cuanto termino de cocinarlos, me sirvo en un plato y voy hasta el comedor, me siento y mientras intento comer voy viendo los redes y no sé por qué razón, si es el destino, el karma, no sé por qué diablos, pero todo lo que veo es sobre embarazo, dejo mi celular a un lado y me concentro solo en comer.

En cuanto termino, llevo lo que utilicé a la cocina y luego decido sentarme en la sala a hacer nada en particular, mientras llega Min.

Una media hora después estoy bastante aburrida y sin ganas de moverme, me acuesto en el sofá y en ese mismo instante escucho la puerta principal abrirse, segundos después frente a mis ojos tengo a Cha-min.

No sé por qué, quizás por nostalgia, o quizás sean las infinitas emociones que tengo dentro de mí, pero al verlo mis ojos se llenan de lágrimas, él me sonríe, pero al verme llorar su sonrisa se borra, deja lo que tiene en la mano en un sillón y yo me pongo de pie y corro hacia él.

Me aferro a su pecho y lloro en este, Min envuelve sus brazos alrededor de mí y no dice nada, solo me aferra cada vez más y escucha mi llanto.

Minutos después me calmo un poco y Cha-min me lleva al sofá, ambos nos sentamos allí y él me mira intentando descifrar que me sucede.

— Amor, jamás te había visto de esta manera, ¿Qué sucede? —

Mi amor pasa sus manos por mi rostro, quitando las lágrimas que caen.

Ser tu mamáDonde viven las historias. Descúbrelo ahora