11. Vampiros -Zaintsee -Terminada

I

2000 años atrás.

Lyn Pruk la reina vampiresa está por dar a luz.

...-Mi señora, el bebé ya está listo, empuje ya- habló Janis, la matrona y lacaya, traída para ayudar en el alumbramiento.

Esta empujó con todas sus fuerzas.

-¡Vamos mi señora!... ¡un poco más!. ¡Empuje!... ¡empuje!....¡si! ¡si!...¡siga así!... ¡ya viene!...¡ya está aquí!...

Fuera de la habitación, en el salón de la gran mansión Pruk, el gran jefe  espera nervioso el nacimiento de su primer hijo y su heredero.

-Pete... asómate para ver como va todo- ordenó a uno de sus guardianes.

El llanto del recién nacido se escuchó fuerte y claro en el pasillo pero el vampiro quiso asegurarse como su jefe le había indicado, así que abrió un poco la puerta y asomó la cabeza

-Es un varón, mi señora y es muy hermoso—dijo Janis con el bebé en brazos.

Rápidamente Pete regresó con las noticias al gran salón.

-Mi rey ya ha nacido y es varón.

El vampiro feliz y muy ansioso, salió como un rayo hacía los aposentos donde pondrían al nuevo príncipe.

Kong se sentó a esperar que lo trajesen, mientras sostenía unos de los sonajeros que había hecho fabricar para su primogénito.

Mientras Lyn, agotada iba a descansar pero de pronto nuevas contracciones la asediaron.

—¡Me duele!... ¡Aaaah, me duele!.

La mujer entonces le miró muy sorprendida.

-¡Viene otro, mi señora!...¡hay dos!...

Por fin la puerta se abrió y una de las doncellas trajo al bebé ya limpio y vestido con los delicados y exclusivos encajes que su esposa había bordado.

-Mi rey, es un hermoso y fuerte varón- le dijo sonriendo.

Este cogió a su hijo en brazos, muy emocionado y lleno de orgullo.

-Bienvenido al mundo mi precioso Zee Fighter Pruk-dijo mirando los preciosos ojos rojos de su bebé.

De repente la puerta se abrió de nuevo y contempló con sorpresa como la misma doncella traía otro bebé, el cual colocaba en su regazo también.

-Está es una niña, fueron mellizos.

Pete entró.

-Mi rey emm...debo informarle que ya están aquí, le esperan...se han enterado ya- habló.

El vampiro sabía que los tronos disputados por hermanos gemelos habían generado guerras durante generaciones pero no estaba en absoluto preocupado pues su segundo hijo era una hembra y no habría lugar a enfrentamientos, su hijo varón sería algún día el nuevo rey de la Comunidad y su hija sería la princesa.

Este depositó a los dos bebés en la única cuna que existía y salió de la habitación para volver al gran salón pues debía hablar con su Consejo, el cual había sido convocado con anterioridad por otros motivos.

-Mi rey, los enemigos intentan debilitarnos y debemos luchar una vez más- comenzó diciendo Marcus, uno de los ancianos.

-Lo sé mis fieles consejeros... Son tiempos difíciles para nosotros pero hoy mi esposa a dado a luz a mi heredero. Zee Fighter y es un varón fuerte y sano...él mantendrá la seguridad de nuestra raza...

Durante horas debatieron sobre estrategias y lucha, mientras que Lyn exhausta por sus esfuerzos, contemplaba a sus hijos al pie de su cuna.

-Mi señora, ¿no teme que los demás los crean débiles, si crían a dos príncipes?-dijo la matrona acercándose.

Ests la miró fijamente y de un salto agarró a la mujer por el cuello, entonces sus ojos se volvieron rojos y la mordió hasta saciar su sed.

-Eso no ocurrirá pero de todos modos tú no lo verás-dijo tras soltarla y limpiar su boca.

Una de las doncellas entró con la comida de los recién nacidos y vio a la humana muerta en el suelo.

-Mi señora, los biberones ya están tibios.

-Encargate de eso ahora mismo Lizz-dijo esta señalando al suelo.-...yo alimentaré a mis hijos.

—Si, mi señora.

De nuevo los ojos de Lyn volvieron a su estado normal y entonces cogió a sus bebés.

-Comed mis hermosos hijos y seréis los seres más envidiados y temidos de este mundo.... Juntos seréis invencibles, yo me encargaré de que así sea.

Al terminar los volvió a poner en la cuna y los miró tiernamente, de repente en su espalda sintió los dedos deslizantes de su esposo que la abrazaron por detrás.

-Hola mi reina, te amo tanto.... Hoy me has dado los dos bebés más hermosos que jamás pude esperar.

Esta se giró y lo miró preocupada.

-Dime que vivirán los dos... Dime que no sacrificaremos a ninguno-dijo pensando en lo que había dicho la matrona humana.

-No mi amor, Zee será el que gobierne y nuestra pequeña permanecerá junto a él. Por cierto, pero ¿Cómo le llamaremos?, no teníamos un nombre pensado para ella... Ha sido una preciosa sorpresa con la que no contábamos.-dijo el vampiro besando el cuello de su amante esposa.

Lyn miró al lugar donde la matrona había caído muerta y entonces recordó su nombre.

-Janis, mi amor.....nuestra princesa se llamará Janis May Pruk.