The observer || HunHan

II

Sábado, 6 de octubre.

Durante la semana se me ha hecho difícil volver al parque para tomar notas, entre el trabajo y mis estudios realmente me queda poco tiempo disponible. Tal vez deba poner algún día fijo para venir aquí, el sábado suena a una buena opción. Después de todo es bueno tener algunas horas de tranquilidad a la semana.

Ahora mismo estoy sentado en la banca cercana a la fuente que elegí el sábado pasado, pero esto es pura coincidencia. Cuando llegué caminé bastante sin ningún objetivo en particular, viendo a diferentes personas hacer las mismas actividades que el fin de semana pasado. Sin darme cuenta había llegado otra vez a la zona de juegos infantiles y decidí quedarme aquí porque una pareja de ancianos llamó mi atención.

Ambos están arrojando migajas de pan para las aves mientras conversan alegremente. La comodidad que sienten en compañía del otro es muy notoria, sobre todo cuando observas que ellos complementan sus movimientos, supongo que es uno de los efectos de estar años juntos. El pan se les agotó. La pareja se pone de pie y a paso lento se aleja.

Ya son las 6.13 p.m. Lo he visto en mi reloj. Otra cosa que he visto es como el chico apuesto de la vez pasada llega junto a su pequeño perro blanco. Ahora tiene un atuendo diferente, más casual. Luce un abrigo de lana gris sobre un suéter oscuro, pantalones de jean junto a zapatillas negras y una bufanda azul que se mueve un poco por el viento de este otoño.

Este hombre está siempre serio, sin embargo no parece ser enojo lo que tiene, simplemente creo que es alguien poco expresivo. De vez en cuando se le escapa una sonrisa al ver que el perro hace algo gracioso.

Luego de una hora él se está yendo y yo noto cuan embobado he quedado luego de verlo, debo mejorar mi disimulo.

Han, 2012.