Romance | Kookv

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El ambiente era perfecto.

Estaba en un jardín precioso, en donde se realizaría sólo la boda y la ceremonia en un salón cerca a ella. Todo estaba tan bien decorado, para empezar, un arco lleno de preciosas flores blancas y rosadas te daban la bienvenida, otras eran parte del diseño en las sillas y varios pétalos de rosas estaban esparcidos por es césped. También en las esquinas del jardín, encontrabas unas mesas pequeñas con una especie de caja, llena de varias fotos de la pareja, desde su juventud hasta la actualidad.

Por un lado, estaba Jungkook, quién estaba muy nervioso, sus manos temblaban y no podía calmarse. Su hermana se iba a casar en unas horas y quería llorar. 

Su pequeña hermana, que había cuidado de él cuando sus padres se fueron. La amaba tanto y no podía explicar cómo.  Esta mañana se prometió que todo tendría que salir bien, y él se encargaría de ello.

Le escribió una canción también, inspirada en su relación con Matthew, el chico que había conquistado a su hermana. ¿Quién lo diría? Porque Somin no es la chica que se enamora fácilmente, pero cuando lo conoció, cayó a sus pies. Y ella, le había descrito el sentimiento del amor.

No lo entendía y es que, Jungkook está tan ocupado con su carrera que un sentimiento como el amor, no se le cruzaría ni hoy, ni en meses. Eso se le había metido en la cabeza.

-¡Jungkook! -gritó alguien detrás suyo. Volteó detrás suyo para ver a Jiwoo, la mejor amiga de su hermana. Su expresión era de felicidad, le sonrió. 

-Jiwoo, ¿Pasa algo? -preguntó el cantante viendo su maquillaje algo corrido. 

Jiwoo limpió las lágrimas que amenazaban con volver a salir y le negó.

-Tu hermana quiere verte, está muy feliz. Vamos. -Jiwoo le cogió de la mano y juntos fueron a un salón cerca del jardín. Cuando llegaron al salón, sus ojos se dirigieron inmediatamente a su hermana, quién era atendida por unas maquillistas que Jiwoo había contratado. Su hermana lo vio y rió cuando vio al menor soltar algunas lágrimas. 

-Koo, no llores. -le dijo la joven, y se levantó con ayuda, corrió hacia su hermano y no dudó en abrazarlo. Él le correspondió y se separó un poquito para mirarla y sonreírle. 

-Somin, ah, te ves demasiado preciosa. Mírate. -dijo, mientras recibía un pañuelo por parte de su hermana, empezó a secar las lágrimas, mientras seguía pensando lo linda que se veía su hermana.

-No sabes cuanto amo este vestido Koo, valió la pena esperar a que Kang lo diseñara. -dijo su hermana.

-Podríamos haberte pedido uno de Italia, pero querías ese. -recordó, y Somin soltó unas risas. 

-Ya, Kook. Mi hermanito se ve precioso, por cierto. -Jungkook rió. -Estoy emocionada. ¿falta mucho?

El menor se fijó en su reloj dorado en su muñeca y hizo una 'o' con sus labios. Menos de veinte minutos.

-No, no. Veinte minutos. Ya vengo. -dijo, y salió corriendo hacia afuera, bajó los escalones rápido y se dirigió hacia el encargado de la boda. Tenía unos papeles a la mano y estaba revisando que todo estuviera listo. 

-Joven Jungkook, ¿Sucedió algo? -preguntó el señor apenas lo vio.

-Está todo listo, ¿cierto? -preguntó ansioso. 

-Todo listo, joven. El padre llegó hace apenas unos segundos y está en su mesa ordenando todo. Los fotógrafos personales están listos, y los de algunas empresas también, esperando afuera. Los asistentes llegarán dentro de poco. -respondió con una sonrisa.

-De acuerdo, que los de seguridad no dejen entrar a nadie que no esté en la lista, por favor. 

-Claro joven Jungkook, eligió un buen lugar para que su hermana se case. No hay ningún fan.