Una Fangirl en la CreepyHouse |2| [Finalizado]

Día 28

Sorry, por problemas en Wattpad no pude actualizar enseguida. Sepan disculparme la tardanza por otro lado ya que trato de cumplir las expectativas de la gente a que haga capítulos largos, pero a veces se me complica, mil disculpas.

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Casi ni podía sentir su corazón latiendo a miles por hora debido a que corría por aquella pradera sumado a que pequeñas gotas comenzaban a caer por la zona, desde hace quien sabe cuánto tiempo no se había sentido de esa manera. De pronto en lo que había estado riéndose hace unos minutos se transformó en una agonía interna que ni él podía saberlo, un pitido pasaba por sus tímpanos y distorsionaba en segundos el sonido que estaba escuchando, y en su cabeza solo él podía describir cuánto odiaba escucharlo repetitivamente.

— ¿Qué es esta mierda? —Masculló Toby.

Aclaró la vista dando un último paso pesado al césped, en mano apretaba el mango de su única hacha que había traído habiendo olvidado la otra de manera despistada en aquella maldita casa. A través de sus googles y de lo que podía por la oscuridad lo vio.

Notó aquellas siluetas, pero lo que más llamó su atención sin duda era aquella criatura de piel casi pálida o ceniza, sin forma, brazos largos con varias manchas de algún líquido que aún no pudo distinguir ¿Quién era ese? Encorvado se le notaban los huesos de lo que parecía ser los omóplatos. Al bajar por su torso descubrió que había sido perforado por una hoja de un cuchillo de caza que aún mantenía firme aquella persona.

— Oye, suéltalo, debemos correr. —Escuchó aquella voz tan familiar.

— Masky. —Habló Toby aún entrando en todos sus sentidos.

El nombrado giró su mirada bruscamente sin detener sus intentos de sacarle el arma a su contraria. Hoodie quien también estaba allí actuó con rapidez poniéndose en frente de Toby creando una barrera.

— Tobías, debes irte. —Ordenó Hoodie.

Ante el Intentó de dar unos pasos sintió cuando pisó un charco, mirando con atención el leve color rojo, era sangre humana dado que la sangre de aquella bestia paralizada era de un espeso color negro. Sus neuronas que milagrosamente funcionaban recordaron que el equipo era de sus compañeros, Masky, Hoodie, Nathan y la demonio.

— ¿Que mierd...

Aquella bestia que aún no localizaban su especie rugió retirando ferozmente aquel cuchillo con sus filosas garras, golpeando a su atacante una vez más generando que quedara en el suelo tosiendo aguantando aquella agonía.

Cuando por fin Toby se dio cuenta de lo que sucedía, hirvió en odio, sus tics se volvieron insoportables. Y en un rápido movimiento, estampó su hacha contra aquella criatura, lleno de desprecio, cortándole una extremidad.La bestia al sentirse bajo amenaza decide retirarse corriendo a esconderse por la arboleda.

— Maldición. Vamos, levántate idiota. —Mandó Masky a la herida levantándola bruscamente.

— Con cuidado.—Murmuró Hoodie, él la ayudó a levantarse. No podía hacer mucho ya que ella cubría su ojos con una de sus manos.

— ¡Vamos, maldición! Debemos seguir. —Insistió Masky ya bastante alterado a lo desconocido.

Nathan quien había permanecido en absoluto silencio se encargó de llevarla en su espalda y salir corriendo, Hoodie obligando a Toby a seguirles el paso. Porque al parecer, no eran los únicos allí quienes eran los enemigos.

. . .

— ¿Me puedes decir que haces?

— Robando un poco de estos cuchillos. —Contestó el Azabache con toda la tranquilidad.