"Un pasado que nos une"

13. Humor, Horror y todo lo que termine en "or"

Estaba con Jack en su auto cuando una de mis canciones favoritas empezó a sonar.

- ¡Jack! Súbele el volumen, súbele, anda. -dije mientras lo miraba a ver entusiasmada.

- Súbele tú, Dumm. -dijo mientras quitaba la mirada de la carretera una milésima de segundo para voltearme a ver.

Sonreí satisfecha y le subí el volumen al máximo. Grité del susto y Jack se tambaleó de la carretera un poco, por lo que volví a gritar. Jack llevó la mano al estero y la apagó rápidamente, segundos después se orilló y apagó el auto.

- ¡DUMM! Si le vas a subir ¡No le subas tanto! ¿¡Me quieres dejar sordo!? -dijo alterado.

- Pe-perdón. -dije mientras miraba mis pies avergonzada.

Escuche que Jack suspiró, y puso el carro en marcha. Ninguno de los dos hablaba, había un silencio incómodo entre nosotros. Jack fue el primero en hablar, lo que agradecí demasiado.

- Lo lamento Brooke, pero me has matado del susto. -dijo mientras se pasaba una mano por el cabello, cosa que hacía cuando estaba nervioso.

Lo mire confundida.

- Aquí quien se debería de disculpar soy yo, ¡Casi nos mato! -dije.

Jack mostró una sonrisa de lado, y me volteo a ver.

- Exagerada. -dijo burlón mientras volteaba su mirada a la carretera.

Segundos después Jack aparcó el auto en mi cochera. Cuando el auto se detuvo por completo, me bajé y me dispuse a abrir mi casa. Estaba cerrada.

Toqué. Nadie respondió. Volví a tocar y esperé. Nada. De nuevo. Otro intento fallido.

- Jack. -dije tratando de llamar su atención.

- ¿Sí?

- Mi casa esta cerrada. -dije un poco preocupada. Jack me volteo a ver.

- Y, ¿qué tiene? -dijo dudoso.

- ¡No tengo las llaves! -contesté exasperada.

Jack me miro con una sonrisa burlona. Mi teléfono empezó a sonar, Jack y yo nos miramos dudosos ¿Quién podría ser? Revise la pantalla de mi teléfono, número desconocido. Contesté el teléfono y hable.

- ¿Bueno? -pregunté.

+ ¿Brooklyn?

- Sí, habla ella ¿Quién habla?

+ ¿Estás en tu casa?

- Eh... Sí ¿quién habla?

+ Iré para allá ¿te molesta?

- No me haz dicho quién....

+ Gracias, nos vemos en unos minutos.

Mire la pantalla de mi teléfono y suspire resignada ¿Quién me había hablado? ¿Venía a mi casa?

- Hey Brooke, ¿Quién era? -preguntó Jack.

- Eh... No sé.

- ¿Cómo que no.....? -se empezaron a escuchar ruidos a un lado, por lo que volteamos.

Había una señora gorda (diciéndolo de manera formal, ya que le quedaba poco. Sin ofender, señora que no conozco) batallando con un chihuahua. Mire a Jack con burla y reí disimuladamente ¿Como una persona podría batallar con un chihuahua? Le creería con un Labrador, pero, ¿un chihuahua?
Jack volteo la mirada hacia a mí y siguió hablando.

- ¿Cómo que no sabes quien era?

- ¡Puchi! No te hagas el difícil, me vas a terminar tirando. -había dicho la señora del chihuahua.

- Pues no, no me quiso decir, pero me dijo que en unos minutos venía para acá.

- ¡Puchi! ¿¡Por qué eres tan fuerte!?.

- ¿Ósea que va a venir una persona que no conoces?

- Puchi malo, le voy a decir a tu mamá que ya no te de tu comidita de perrito bueno, ¡le diré que te saque a la calle como el mal puchito que eres!

- Más o menos, ni siquiera se si lo conozco Jack. Tal vez lo conozco y nosotros preocupándonos ¡solo piensas en lo malo!

- Pu-Puchi, mas lento ¡CHICO MALO!

- ¿Y si no lo conoces qué? -preguntó con enfado.

- Puchi....

Jack y nos volteamos exasperados y gritamos al mismo tiempo.

- ¡YA CÁLLESE SEÑORA! -ella nos volteo a ver resignada y se volteo con su "Puchi" meneando la cintura exageradamente.
Hice una mueca de asco, la imagen había quedado impregnada en mi cerebro y jamás la iba a poder sacar de ahí.

- Mierda, jamás podré sacar esa imagen de mi cabeza. -dijo Jack con una mueca de asco.

- Estaba pensando exactamente lo mismo. -respondí con una mueca, segundos después la cambie por una sonrisa burlona.- Ministro Dumm, ¿Usted tiene el poder de leer las mentes? ¿Telepatía, tal vez?

Jack rodó los ojos,

- Aquí la DUMM eres tú. Como te decía, ¿Qué pasa si no conoces a la persona que vendrá?

- Ya me las arreglaré. -contesté tratando de sonar con indiferencia.

Jack mostró una sonrisa burlona.

- Eso de mentir no te queda, Dumm. -dijo. De repente, su mandíbula se tensó y sus ojos miraban detrás de mi con furia. ¿Quién había llegado? Intente voltear hacia atrás, pero Jack me sostuvo del brazo con un poco de fuerza.

- ¿Jack...? ¿Quién esta ahí? -le dije en un susurro.

Jack ni siquiera se tomo la molestia de voltearme a ver, esto estaba resultando espeluznante.

- ¡Qué bueno que lo preguntas! -respondió alguien sarcásticamente.

Esa voz.... Yo conocía esa voz. Abrí los ojos como platos.

- Ryan. - soltó Jack con notorio asco al pronunciar su nombre. Sabía que era él. Me aferre con fuerza al cuerpo de Jack.

Era Ryan. Mi anterior padrastro. Había intentado matarme cuando tenía la de edad de 11 años.