Capitulo 7

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Se sale de la cama y se dirige al baño cierra la puerta y escucho la ducha, me golpeo mentalmente que vergüenza, aprovechó que esta en la ducha y me visto, que situación más rara por casi pierdo mí virginidad con el.
Me dirijo a la cocina cuando me desperté y el no estaba descubrí donde estaba la cocina porque no escape porque hay hombres armados por todas partes, conocí a Margarita es muy buena, cuando me ve entrar por la puerta de la cocina se dirige a mi rápidamente.

- Niña de verdad que lo siento no pensaba que Kevin y tu, es que... el no suele traer chicas a.... - la corto y la agarro sus manos juntando las.

- No te preocupes, no sabias - ella no tiene la culpa no suele estar acostumbrada por lo que dijo.

- Tu y el ¿estáis juntos? - niego rápidamente, el y yo, imposible despierta en mi muchas cosas pero estar juntos sería imposible somos muy diferentes y no se me olvida quien es y lo que hizo.

- No eso no puede ser - me mira raro pero cambia de tema rápidamente.

- ¿Tienes hambre? Prepare algo que seguro te chupas los dedos estas muy delgada necesitas comer más - por inercia ruedo los ojos la costumbre me recuerda mi tía, tengo ganas de llorar pero me aguanto porque esta Margarita delante mía.

Me siento en una silla y me quedo mirándola como termina la digo si necesita ayuda pero me niega, no entiendo una mujer como ella aguanta a Kevin con sus cambios de humor.

- Aquí tienes preciosa - la sonrió.

- Oye Margarita ¿como que trabajas aquí? - deja de fregar los platos y me mira.

- Me gusta este sitio aunque este lleno de hombres con armas, una ya se acostumbra cuando lleva 22 años aquí - abro los ojos como platos.

- 22 años ¿enserio? - se ríe y asiente con la cabeza.

- Desde que Kevin nació - osea que Kevin tiene veintidós años, dios no puedo estar más sorprendida igualmente la preguntó para salir de dudas.

- Entonces ¿Kevin tiene 22 años? - asiente con la cabeza.

- De verdad que me sorprende verte aquí el no suele traer a chicas aquí y menos estar con ellas en su habitación no lo digo por nada solo que me sorprendió, parece ser que eres una chica especial - si ella supiera porque en realidad estoy aquí.

Como estaba riquísimo la verdad que cocinaba genial me despido de ella y salgo al pasillo miro hacia la puerta hay siguen los hombres protegiendo la con sus armas suspiro decido irme a mi habitación no puedo hacer nada me voy a volver loca al final, cuando subo las escaleras y voy por el largo pasillo escucho unas voces en el mismo sitio que me golpe la cabeza, me asomo la puerta esta medio abierta y se puede ver quien hay.

- Ya no estas al mando así que no me vengas a joder - Kevin esta muy cabreado por su tono, hay un hombre en una silla de ruedas se nota que es mayor por sus canas y aspecto.

- ESTA EN JUEGO LA BANDA O ES QUE NO LO ENTIENDES - le grita el hombre, Kevin se levanta de su asiento y le enfrenta.

- QUE TE CREES QUE NO LO SE O QUE COJONES TE PASA ¿EH? - no le conozco pero pongo la mano en el fuego a que lo que sea la relación que los une que Kevin le tiene odio solo por su forma de mirar.

- Esa chica te esta comiendo, cuando me dijeron que mandabas a gente que la vigirala todos estos años pensaba que era por el bien de la banda para mantener la controlada pero me equivoque era por algo más - el hombre le habla con un tono mas bajo.

- Que quieres insinuar ¿eh? dilo ya de una puta vez - se vuelve a sentar y se toca su pelo como si estuviera incómodo.

- Recuerda hijo que yo estuve ese mismo día allí y me di cuenta como la miraste por primera vez lo deje pasar porque pensaba que te ibas a olvidar pero no seguiste queriendo saber lo que hacia cada día y ahora está aquí y no as conseguido nada - me apartó y me pego contra la pared es su padre, que pudo pasar para que terminara así.

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