Secuestro Inesperado

Capítulo 5

Me quito la ropa, esta claro que cuando le vea le voy a preguntar, cómo haiga sido el me voy a morir de la vergüenza.
Me meto y cierro la puerta de la ducha, el agua cae por mi cuerpo me apoyo con mis manos en la pared y dejó que el agua me relaje el cuerpo y empiezo a pensar no se cuantas horas llevaré en este sitio pero mi  tía tiene que estar súper preocupada por mi y mi mejor amiga me pone triste solo de pensar que abran ido a denunciar mi desaparición y la angustia que tiene que estar pasando, dejó de pensar cuando escucho que llaman a la puerta dentro de la ducha grito.

- ¿Si? ¿quien es? - no se quien es no me fío de nadie.
He visto tantos hombres en este sitio que puede ser cualquiera ya se quien es el "jefe" el sin duda le voy a llamar el hombre de los ojos verdes porque no me se su nombre, no entiendo tampoco porque de tenerme en un sitio horrible me a traído a un sitio mucho mejor, nadie contesta me quito el champú de mi pelo y decido abrir la puerta de la ducha y salir me en vuelvo en la toalla y habló de nuevo.

- ¿Quien es? - lo digo con preocupación me da miedo de si es alguno de los hombres suyos.

- ¿Estas bien Mía? - suspiro más tranquila al escuchar su voz.

- Si, me estaba duchando - le digo me seco y me estoy poniendo la ropa que me dejó.

- Te espero aquí afuera te tengo que decir una cosa - al saber lo que es puede ser más mentiras me sigo sin creer lo que dijo de mi padre, me quejó esta ropa no es la que me suelo poner es un poco más apretada.

- Vale, no tardo - le digo y es la verdad ya estoy vestida me voy a lavar los dientes hace días seguro que han pasado que no me lavo los dientes y eso para mi es terrible no quiero ni pensar si hubiera pasado más tiempo.

Me siento mucho mejor después de estar limpia, suelto un suspiro largo y abro la puerta esta sentado en la cama esperándome no se porque pero mi cuerpo actúa diferente y un escalofrío siento hay en el otro lado la silla me voy y me siento en ella.

El me mira raro como sorprendido de que me aleje de el que se espera es un desconocido y encima es mi secuestrador.

- No te voy a hacer nada - parece que le molesta que este a una distancia de el parece ¿ofendido? No creo con lo frío que es seguro que en el fondo le importe una mierda.

- No me fío de ti - el me sigue sin apartar la mirada de mi hace que le sienta incómoda y me remuevo en la silla el lo nota, provoca cosas en mi que nunca había sentido.

- Si intentas colarme que no sabes nada del tema de tu padre te equivocas conozco perfectamente a las niñas como tú - le miro raro y pienso este es gilipollas así de claro.

- No intento colarte nada te dije que no se nada y me sigo sin creer que mi padre hiciera esas cosas - me levanto de la silla pero no me muevo del sitio.

Suelta una carcajada pero seca como que no se lo puede creer lo que le estoy diciendo se acerca a mi rápidamente yo me pego a la mesa.

- No me crees, ¿no? - niego con la cabeza.

Me coge del brazo y me lleva fuera de la habitación.

- Suéltame - intento hacer fuerza parando me en mitad del camino pero el tira más fuerte que bruto es dios mío, no me hace caso a mis réplicas y vamos por un pasillo hasta que bajamos por unas escaleras intento bajarlas lo más rápido que puedo para seguir su paso me resulta difícil, va más rápido echo una ojeada rápidamente y esto es como una casa normal.
Dejó de mirar todo a mi alrededor cuando me empuja dentro de una habitación y pongo las manos en una mesa porque si no me la hubiera tragado.

- No te han enseñado que ¿a las mujeres no se las trata así? - le grito mientras me sobo las manos.

- Cierra la puta boca - me grita este niño es un puto bipolar de mierda.