Capítulo seis

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"El primer beso no se da con la boca, si no con la mirada"
(Tristan Bernard)

No importaba las veces que maldijera, P'Ohm no le daría las razones de su comportamiento, ni mucho menos se retractaría de todas las cosas que había hecho, si tan solo le dijera para que necesitaba casarse con un chico, él lo entendería, probablemente aún se negaría, pero, incluso podría ayudarlo a buscar alguna alternativa. Solo habían pasado tres días desde que tuvieron aquella conversación y Fluke todavía creía que era alguna especie de juego o alguna clase de broma de mal gusto, pero no era así, Ohm Thitiwat no era de esos que bromeaban. Miró el sobre que aún no se atrevía a abrir, documentos que tenía que devolver firmados, suponía que ahí, estaban especificadas sus obligaciones y todo lo relacionado con el matrimonio de los dos.

Era domingo y había quedado ir con P'Phom a dar una vuelta en bicicleta y aunque no tenía ningún animo de salir de casa, decidió que era hora de distraerse un poco, si su madre viera como se dejaba vencer no se sentiría para nada orgullosa de él, así que salió de casa solo porque quería olvidarse un poco de P'Ohm y su idea de casarse.

- ¿Estás bien Fluke?

- Si P', estoy bien.

- Es que estás muy distraído desde que salimos de casa.

- Lo lamento P' es que me han sucedió muchas cosas.

- ¿Quieres contarme?, ¿hay algo en lo que te pueda ayudar?

- No..., mejor vamos a seguir. – Dijo, echando a pedalear de nuevo. Pararon solo para hidratarse y luego P'Phom sugirió que fueran a comer algo, luego de eso se excusó diciéndole que tenia algo que hacer.

Después de tomar un baño, se decidió a abrir el sobre y se sentó a leerlos, de una vez por todas, vería que clase de barbaridad se le había ocurrido a ese loco.

Primero tenia estrictamente prohibido hablar sobre ese contrato, nadie debía enterarse que no se casaban por amor.

Segundo, pasado un año, ambos se divorciarían de común acuerdo, sin escándalos, reclamos o cualquier otro tipo de problemas.

Tercero, Ohm se comprometía a pagar en su totalidad la hipoteca de su casa y de conservar las propiedades de sus vecinos, además de una pensión de por vida por haber aceptado ese contrato. – Abrió mucho los ojos cuando vio la suma, si quería no tendría que trabajar lo que le restara de vida.

Cuarto, estaban prohibidas las relaciones extramaritales, ninguno de los dos podía tener alguna otra relación durante el año que estuvieran casados.

En definitiva, durante ese año de casados, debían simular ser la pareja mas feliz del mundo, a los ojos de los demás, ambos se casaban por que estaban enamorados. La ceremonia se llevaría a cabo en dos semanas y sería de conocimiento público. El contrato comenzaría a regir desde el momento en que estampara su firma en la hoja.

Fluke releyó el contrato, no tenía ningún pero, excepto eso de la pensión de por vida, Ohm podía olvidarse de eso, jamás aceptaría ser mantenido por nadie, para eso estudiaba. Solo quería terminar sus estudios y luego de eso vivir tranquilo. Así que tacho esa parte, luego cerró el sobre, llamó a Marco y le pidió que se lo devolviera al señor Thitiwat. Luego de una hora, tenia el contrato en sus manos otra vez, solo le restaba firmarlo. Se dio tantas vueltas como pudo por la casa y luego de recordar que aquel lugar era todo lo que le quedaba de su familia, tomó el contrato y lo firmó, pensando que esa era la mejor decisión que podía tomar en un momento como ese.

- El señor Thitiwat pide que lo acompañe esta noche. – Dijo Marco en cuanto Fluke devolvió el contrato. Apenas había firmado y ya comenzaba a darle órdenes.

UN ÁNGEL PARA MIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora