Capítulo extra - "Sylvie"

215 13 1
                                    


Segunda entrada

Hola de nuevo ¿diario?, Me pregunto si debería ponerte un nombre, lo siento por no escribir por unos días pero han pasado un par de cosas interesantes.

Primero descubrí que la casa tiene una azotea, una palabra nueva que me enseñó amo, al parecer estuvo olvidada por completo y entiendo bien el motivo, es difícil ir ya que está en el ático.

También aprendí lo que es un"ático", según Nephy es un espacio que está por debajo de la azotea pero se suele utilizar como un almacén.

Recuerdo que esa zona estaba llena de polvo y cajas con cosas viejas con cosas que amo ya no quería o había olvidado que tenía, bueno eso creo ya que el dijo que solamente había entrado dos o tres veces ahí, así que en cuánto entramos me dediqué a limpiarlo lo mejor que pude, Nephy me ayudó bastante aunque para llegar teníamos que utilizar unas escaleras plegables que salían del techo, a ella le parecía muy emocionante cada vez que la utilizabamos.

Después de unas cuantas horas logramos limpiar todo, incluso las niñas nos ayudaron, aunque fue difícil subirlas y no paraban de estornudar debido al polvo al igual que yo.

Cuando el ático estuvo totalmente limpió Nephy vio una pequeña puerta de madera blanca con algunos cristales en ella, aunque estos estaban sucios, cuándo la abrió encontró una terraza.

Era un lugar en el techo de la casa, estaba lleno de maleza y tenía algunas sillas y una mesa de metal algo oxidadas, en cuánto llegamos ahí traté de ayudar a Nephy a limpiar, pero amo llegó y me pidió que descansara un rato, no me gustaba la idea de dejarle todo el trabajo a amo y a Nephy, pero le hice caso y bajé a pasar un tiempo con las niñas.

Después de unas horas Nephy y amo bajaron, se veían cansados y ella parecía que tenía un golpe en el ojo.

Aunque Nephy dijo que no le había pasado nada, amo me contó después su golpe fue por un juego, me contó que habían encontrado dos palos de madera algo largos y los comenzaron a usar como si fueran espadas, al inicio los golpes eran lentos pero fueron golpeando cada vez más fuerte por la emoción y amo terminó golpeando a Nephy en el rostro por accidente.

Por fortuna no fue algo muy malo y aunque Nephy tuvo el ojo un poco lastimado por algunos días, se le quitó rápido.

Unos días después de eso, Nephy vino a casa y amo estuvo hablando con ella por un tiempo, cuándo terminaron de hablar Nephy me pidió que la acompañara a comprar algo de ropa, la idea me gustó y al pedirle permiso a amo el accedió sin problema.

Salimos de casa y fuimos a la tienda de Aurelia.

Aunque estaba algo nerviosa al no salir junto a amo, Nephy se aseguró de que me sintiera comoda, estuvimos platicando por gran parte del camino, incluso hizo varios chistes que me hicieron reír.

Jamás pensé que me sentiría tan felíz al salir con alguien que no fuera amo, es una sensación extraña pero muy buena.

Cuándo llegamos a la tienda me sorprendí cuándo Nephy fue a susurrar algunas cosas a Aurelia y después me dijo que en realidad estábamos ahí para comprar un vestido para mi.

Traté de negarme a que ella gastara su dinero no pude convencerla y Aurelia comenzó a traer vestidos por montones, algunos parecían ser ligeros y fáciles de poner, otros se veían lujosos e incómodos.

Después de un rato probando ropa, Aurelia y Nephy tomaron un vestido largo de color negro que dejaba mis hombros y brazos al descubierto aunque después me colocaron unos guantes largos que llegaban un poco más arriba de mi codo.

La verdad me sentí muy avergonzada al usarlo, sentía que mi cuerpo estaba descubierto.

Aunque a ambas les gustó ya que ese fue el último que me probé y el que Nephy compró.

Enseñando A Sentir (Segunda Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora