Aurelia
-bueno Sachi, bienvenida de nuevo- dije al cerrar la puerta
Ya ha llovido bastante desde la última vez que vino, estamos algo lejos del centro pero es el precio por una casa grande.
-muchas gracias tía-
Sachi dejó su bolso al lado de la puerta, frente a nosotros había un corredor largo que daba acceso a las habitaciones de la casa el comedor y la cocina a la derecha y a la izquierda la sala, un poco más adelante había cuatro puertas que daban a los cuartos junto a mi estudio.
-es justo como la recuerdo- dijo con una sonrisa
-claro, intenté decorarla un poco con algunos cuadros pero no me convencían, oh lo siento, deja que lleve tú mochila a tú cuarto- traté de recoger su maleta del suelo pero ella rápidamente la tomó
-n-no te preocupes tía, todavía recuerdo cuál era mi cuarto-
-oh...cierto, entonces, ¿qué tal si preparo la cena?, debes de estar hambrienta y compré los ingredientes necesarios para mis macarrones especiales-
El ojo de Sachi se iluminó y asintió rápidamente.
-me encantaría- dijo para después comenzar a caminar
-bien, de mientras ponte cómoda- levanté mi mano para acariciar su cabeza, pero me detuve antes de alcanzarla, ¿Le gustaría?
Suspiré al verla entrar a su cuarto, si tan siquiera tuviera el valor de hablar las cosas.
Entré a la cocina y sacudí la cabeza, trataba de no pensar más en eso, saqué los ingredientes que necesitaría, puse mi sombrero en un perchero cercano, me coloqué un delantal blanco y comencé a cocinar
Medía hora después
-¡Sachi ven a cenar!-
La mesa estaba puesta con dos manteles y una gran jarra de de agua de limón.
La receta secreta de estos macarrones no eran nada del otro mundo, solamente utilizo un queso diferente al cheddar, su sabor no parece a ningun otro y por si solo sabe horrible aunque claro a ella dije que era una receta con más de 10 especias.
Escuché la puerta abrirse y sus pisadas haciendo eco en el pasillo, en cuánto me senté ella entró usando un conjunto de pijama marrón que le hice hace unos años... ¿La está usando por obligación?
Se sentó y comenzó a comer de inmediato, observé su reacción por miedo a no hacerlos de manera correcta.
-tía, ¡Esto está mucho mejor que nunca!
Suspiré al escucharla.
-me alegro de aún tener mi toque mágico para la comida, no suelo prepararlas mucho-
-oh, ¿no los prepara para usted?-
-ja, la verdad es que no, suelo comer cosas con algo más de carne.
El plato de Sachi ya estaba a la mitad.
-comes rápido- dije con una sonrisa
-je, perdón tía, moría de hambre, pensar mucho cansa-
- ah, jajaja perdón no quería entrometerme-
Sachi siguió comiendo ahora un poco más despacio
Mi sobrina Sachi, una de las personas mas fuertes y valientes que conozco
Fue bien recibida en su família, aunque el maldito de su padre se fue mucho antes de que naciera en cuánto ella y su madre, mi hermana mayor, la amaba con todo su ser. Cuándo la ví por primera vez tendría dos meses, su ojo me causaba cierta inquietud, pero más temprano que tarde dejé de verlo cómo algo raro.
ESTÁS LEYENDO
Enseñando A Sentir (Segunda Edición)
Roman d'amourUna historia basada en el eroge de Ray-K, en la cuál se contará la vida de Sylvie y las personas que la rodean en su vida después de llegar con el doctor.