Volver Por Ti (Edward Cullen) (#3)

Capítulo 27

Todos empezamos alistarnos debíamos ir a otro lugar los aliados ya sabían donde estábamos reunidos. Mis gritos no eran lo único que se escuchaba en la mansión. Corrí para ayudar a Renesme para alistar todas sus cosas.

- Jacob ¿tienes todo? - el asintió viendo que Renesme se demoraba.- de os irnos ahora!

- Aria calmate...

-tienen un minuto ayudaré con los portales.. - asintieron ambos. Varios corrían de un lado a otro. Escuchamos un bombazo en un lado, ya estaba empezando. - Apuren!

- Aria el campamento no es seguro.. Están atacando.. - maldije con Annabeth. Mientras más segundos pensaba más seguían atacando.

-bien Iremos todos al Inframundo - algunos se asustaron pero pase al frente para tratar de hacer un portal, el más grande que pudiera. - Renesme! Nathan!

Los dos se acercaron para ayudarme- traigan a los del campamento todos irán..

-bien - vi que Thalia a pesar de saber que era la única forma de sobrevivir a esto ella seguía protestando.

Todos nos callamos cuando escuchamos una explosión en el aire. Volteo para ver que o quien lo ocasiono y miró un cuerpo de negro sobrevolando. Era la hija de Ludmila.

- ingresen ahora! - cómo si fuera manada todos empezaron a correr. Traté de comunicarme con mi hermano en forma mental, conectarme con él. Todos debíamos ir a escondernos.

Ingrese para tratar de mantenerlo desde adentro. Miró mi alredor y casi todos trataban de cubrirse, busque con la mirada a mis hermanos pero no los encontré.

- avancemos.. - dije cuando todos estaban adentro. Me limpie la nariz al sentir que un líquido salía. Mire mis dedos que estaban manchados de sangre. Maldije por estar viéndome vulnerable en frente de todas estas personas.

Camine al gran salón donde estaba mi padre. Pero Annabeth trataba de hablar de una forma poco pasiva con mi padre.

- que ocurre? - dije interponiendo me.

- el Olimpo quiere destruir el hábitat de los humanos.. - sonaba que les hablábamos como si fueran animales.

- no podemos dejar a los humanos con la amenaza.. Debemos hacer algo padre.

- destruirán el mundo.. Y recibiremos a los justos.. - su solución no era la mejor.

- Padre.. No creo que..

- Aria.. Ahora no.. Deberías encargarte de tu pasado antes de estar opinando..

- Padre no puedes tratarme de esa forma cuando sabemos que no podemos crear un genocidio.. Mejor hubiéramos dejado que ese titan hiciera lo que hizo! - acomode mi cabello y les mande una mirada a todos los que estaban viéndome. - si quieres hacer algo como eso.. Lo haremos cuando sea la última opción y no tengamos soldados para ganar una batalla..

Camine para buscar a mis hijos y ver que era lo que necesitaban, varios pedían agua sagrada que solo quedaba poca para sanar a los heridos.

- hijos.. - dije cuando los vi en una esquina.

- madre.. Abuelo esta molesto? - Renessme miraba a su abuelo buscando más signos.

- están bien? Si gustan pueden ir a mi ala.. - dije señalando el otro lado del inframundo.

- estamos bien.. - mi hijo miraba a la hija de Ludmila que hablaba con su madre. Rodé los ojos viendo que mantenía la misma chispa de antes.- hay alguien que no deja de verte. - frunci el ceño volteando a la dirección que me mostraba. 

- Por los dioses..

- lo conoces? Puedo asustarlo

- guárdate eso para cuando haya pelea.. Necesito que Carlisle los reúna para que vayan a mi torre y estén tranquilos..

- madre nos quedaremos.. Estamos bien.. Además acá hay mejor comida..

- no se acerquen a los tragos de su abuelo o tendrán problemas.. - levantaron las manos.

Debía buscar a James para hablar que haríamos para salir de acá. Odiaba estar rodeada de tanta gente. No sabía en quien confiar a pesar de que hayan personas que dieran la vida por el Olimpo siempre habria personas que traicionarian al Olimpo. Rode los ojos cuando vi que el mismo sujeto me seguía.

- no me recuerdas Tenieblas? - me volteo poniendo mis manos en la cintura.- la última vez que nos vimos fue en el 1850..

- vete al hades.. - me voltee para buscar a James.

- Cielo.. - sentí un golpe en la cabeza.

- ¿bailamos? - levante la mirada viendo al individuo. Sonreí tomando la mano de la persona. Bailamos un par de canciones y luego salimos a las calles para caminar.

- ¿y tu De dónde eres?

- soy de Francia vine a Inglaterra para buscar suerte.. Y usted?

- soy de Nueva Escocia.. Pero creo que encontré mas de lo que me gustaría..

-no me acuerdo de ti.. - digo siguiendo con mi camino, maldita sea James donde mierda te encuentras. Necesitaba alguien para contarle. Encontré a Ela con Alec en el camino.- ven te necesito.. Ya regresa..

                       * * * * *

- pero.. ¿Cuantas veces te haz casado?- muerdo mi labio mientras zapateo el piso.

- bueno.. He tenido muchas vidas..

- haber.. Edward.. James.. Matthew.. Aria se te juntara el ganado - la mire esperando que se explique pero al final si entendí la referencia.

- lo olvidarás bien? Esto se lo contaría a Ludmila pero..

-como era el sexo con él? - gruñi ante lo referido. - dime.. Quiero saber.. O sea tu no te casas así por así..

- no te contaré..- sin querer mordí mi labio. Si era bueno. - vamos.. Padre de seguro va querer que estemos en el gran comedor..

- bien.. Iré espero que me den algo decente - me abrazo a penas se levanto de mi cama - extrañaba que me cuentes tus cosas..

- bien.. Bien suelta me no es necesario que me abraces - sonrió mostrando sus blancos dientes. Espere que se vaya para poder ordenar el desastre que ocasiono.

Antes de salir sentí que me jalaron de vuelta a la habitación. Empuje al sujeto y me preparé mentalmente para golpearlo pero detuvo mi puño.

- eres tan hermosa cuando vistes de negro.. - trate de alejarme cuando me sujeto de los brazos y me empujó a la puerta, cerrando la en el proceso.

- Matthew.. Sueltame o te rompo el cuello..

    

                            * * * * *

- ¿tenias que ahorcarme? - mire mi reflejo y tenia la marca de su mano.

- bien que te gusta ese modo - me volteé para que no me vea sonreír, admito si me gustaba.

- bien ahora larga te..-señale la puerta a lo que él aceptó.

-vamos.. Podemos retomar.. - lo tome del brazo sin sus protestas y lo saque de la habitación.