Reencarnando en crepúsculo

Capitulo 4

Capítulo 4

Hogar dulce hogar, primer encuentro

La menor no supo cuando se quedó dormida ya que lo único que recuerda es ver la ventana del avión y luego todo era oscuridad para ella, si no fuera por Bella que la despertó diciéndole que ya descendió el avión y que ya era hora de bajar ella se hubiera quedado profundamente dormida ya que por culpa de la emoción de que iba a Forks ella no pudo dormir bien en la noche quedando con unas marcadas ojeras en sus achocolatados ojos.

Al bajar del avión con maletas en mano salieron del aeropuerto pudieron ver a Charlie esperarlas al lado del coche de patrulla. Él era el jefe de policía Swan y no había cosa que no le enorgulleciera a la menor de las hermanas. Bella en cambio, tenía otra opción. La menor al ver a su padre no pensó dos veces y fue corriendo hacia el oficial aventándose a sus brazos.

- ¡Papá! –grito alegre la menor tratando que controlar sus lágrimas y evitando apretar fuerte al mayor ya que la fuerza de ella tenía la fuerza de poder partir a un humano como a una criatura sobrenatural por la mitad –te eche mucho de menos.

- O...ouch –se escuchó un quejido, la menor y el padre voltearon a ver de dónde provenía el sonido. Era Bella que se había tropezado –hola, papá –la menor se separó del mayor para dejar que la protagonista abrazara a su padre, ambos se abrazaron torpemente. La menor no pudo evitar poner sus ojos en blanco como lo hacía Tony Stark cuando el capitán américa dijo que si entendió la referencia.

- Me alegro de verte, Bella –dijo Charlie con una sonrisa al mismo tiempo que la sostenía firmemente –apenas has cambiado ¿Cómo está Renée?

- Mamá está bien, yo también me alegro de verte, papá –dijo con dificultad lo último la mayor. Ella no podía llamarlo Charlie a la cara.

Isabella traía pocas maletas, estas cupieron sin problemas en el maletero, en cambio la menor solo llevaba 3 maletas ya que dos días anteriores había mandado todas sus cosas a la casa de Charlie dejando su habitación completamente vacía llamando a Charlie que unas personas de confianza de ella le iba a dejar sus cosas a la casa y que por favor las llevara a su habitación que cuando ella llegara iba a acomodar todo. ¿Qué se podía decir? La menor ya estaba lista desde antes de que Isabella le avisara de su plan de ir a Forks después de la boda de Renée, ella ya lo sabía gracias a que leyó la saga completa y miro las 5 películas en su vida pasada por lo que preparo su plan de no dejar nada en esa habitación, incluso los manuscritos de sus novelas fueron llevadas a la casa de Charlie para mayor seguridad. Isabella la considera una joven fría e indiferente respeto a su familia materna pero a ella no le molesta, ella está orgullosa de ser así ya que no la minimiza como adolescente ser así, más bien ella se está preparando para los acontecimientos y los peligros que LA PROTAGONISTA llevara a la familia Cullen como a la suya.

- He localizado un perfecto coche para ti, y muy barato –anuncio el mayor sacando de sus pensamientos a la menor que estaba a punto de dormirse, la menor ya sabía de qué hablaban, la camioneta de Bella que parece chatarra por lo que se acomodó para poder dormir durante el viaje en el asiento trasero mientras Isabella estaba en el asiento del copiloto del auto patrulla –bueno, es un monovolumen, un Chevy para ser exactos...

No escuchó nada más durante el viaje ya que volvió a quedarse dormida en el auto ignorando por completo la charla que tenían ambas personas en frente de ella.

Mientras dormía profundamente soñó con sus amigos de su antigua vida, ella estaba sentada en los escalones de la iglesia de su colegio mientras ellos estaban sentados al lado de ella, unos en los escalones bajos quedando a los pies de los demás y otros alrededor de ella. La menor solo se les quedo mirando con una sonrisa observando y escuchando lo que estaban hablando, sus amigos se encontraban hablando de lo que hicieron en las vacaciones de semana santa en donde unos se quedaron en casa viendo doramas coreanos o series, otros a la playa o a la piscina y otros fuera de Managua; ella podía sentir el viento golpearle el rostro y escuchar por completo las risas de sus amigos e incluso podía sentir la dureza del piso del escalón de la iglesia, ella sentía como que acababa de despertar de un coma en el hospital ya que noto que llevaba el uniforme del colegio de su vida pasada, volteo su mirada y miro a uno de sus amigos que al mismo tiempo era el chico que le gustaba pero nunca le dijo mientras sus amigos los molestaban a ambos de que eran súper shipeables ocasionando que la menor se sonrojada y riera diciendo que dejaran de decir eso.