SERÁS MI JUGUETE

CAPÍTULO 31 : CARAMELO ROTO

El silencio estaba presente en el ambiente, y la mirada de un niño amenazante se centraba en el hombre que tenía frente a él.

—Me obligaron a estar aquí así que hable...— pidió el pequeño.

—Soy Aisawa Shota...— se presentó.

Esa mañana Izuku se dispuso hacer lo que anteriormente su psiquiatra le dijo, debía llevar a Katsuki a su siguiente cita, no lo había hecho por todas las cosas que estuvieron pasando, pero ahora debía hacerlo, Uraraka le contó todo sobre la "Tercera identidad" ella se había dado cuenta de que no era bueno ocultárselo, menos ahora que el pecoso estaba inestable mentalmente.

Fue Uraraka quien terminó convenciendo a Katsuki, ya que después de varias insistencias de parte de Midoriya este no había conseguido nada, aunque de todos modos el rubio iba a terminar aceptando, estaba interesado en saber sobre la situación del pecoso y las personas que estaban dentro de él.

—Soy Katsuki Bakugo...— también se presentó— Aunque el idiota de Deku me cambió el nombre a "Kacchan" pero soy Katsuki Bakugo...— dijo con cierta molestia —¿Que es lo que quería decirme? —preguntó, según los adultos de su casa, ese doctor sabía mucho sobre Izuku.

—¿Te gustan los dulces?— preguntó el mayor, debía calmar el ambiente para explicarle todo, así que consiguió unos dulces para él.

Katsuki lo miró de arriba a bajo con el ceño fruncido y luego recordó los caramelos que le dio la señora que fue a su casa la otra vez, estos le habían gustado mucho.

—Los dulces picantes...— murmuró, el contrario lo escuchó a la perfección así que buscó las dichosas golosinas en los cajones de su escritorio, tenía suerte de haber comprado una bolsa de dulces variados, no era muy común que a un niño le gustara los dulces picantes.

—Aquí tienes...— dijo Aisawa dándole un caramelo al menor, este lo recibió y no tardó mucho en meterlo a su boca —Bien, quería hablarte sobre Midoriya y los problemas que tiene.

—¿Habla de las personas dentro de él?— preguntó —¿Son tres de ellas, verdad...?

—Si, son tres...— dijo, ya había hablado de esto con Midoriya, pero aun no lo había hecho con esa nueva "identidad" esta no se dejaba mostrar, o por lo menos deducía que una de las otras estaba evitando que apareciera— ¿Como sabes sobre esto?— tenía entendido que el niño no sabía nada respecto a los problemas de Izuku, era por esa razón que él se encargaría de informarle.

—Escuché al Izuku siniestro hablando con Uraraka sobre esto... —respondió— ¿Usted sabe cual es el verdadero Izuku?— preguntó, su duda aún no tenía respuesta y quería una ahora.

Aisawa suspiró, al parecer hablar con él sería mucho mas fácil de lo que pensaba, después de todo psicológicamente los niños suelen ser curiosos por naturaleza y era interesante hablar con ellos ya que siempre tenían una pregunta para todo.

—Mas que un verdadero Izuku se podría decir que todos son el mismo...— respondió, esa respuesta confundió un poco al niño.

—No entiendo...— esperaba que en verdad le respondiera su duda y no lo estaba haciendo.

—Mira, te daré un ejemplo simple...— respondió, estaba hablando con un niño así que no podía utilizar palabras técnicas que evidentemente no serían entendidas— Este es un caramelo...— dijo mostrando un dulce que había tomado de la bolsa de golosinas, luego lo sacó de su envoltura y lo puso sobre la mesa— Digamos que este dulce es Midoriya.

—(La siniestra gomita dulce)— pensó, había recordado uno de los nombres que le puso a la última persona que conoció en Izuku.

—Y este pisapapeles es un gran problema que Midoriya no puede afrontar por si solo...— tomó el objeto mencionado el cual también estaba sobre el escritorio, este tenía un peso considerable —¿Que pasaría si este pisapapeles cae sobre este caramelo?