El desayuno de Hanna ayer estuvo delicioso, si no tuviéramos una amistad de tantos años quizá ya habría contado lo que siento, me hace sentir un mal hombre y un mal amigo verla a los ojos. Tener tantas oportunidades de besarla y no hacerlo. Camino por la playa, Tulum es un pueblo muy pequeño pero me encanta. Me gusta estar aquí, la playa me da paz. Además, desde que me enamoré de Hanna no puedo visitarla a solas, tengo miedo de besarla, de cometer un error que la haga sentir mal.
Esta anocheciendo, camino fuera de la playa y subo a mi motocicleta, conduzco hasta mi casa, antes de llegar veo la casa de Lía, me detengo y bajo de ella. Camino hasta la puerta cuando la veo sentada con Jave, siempre han hecho una pareja perfecta, pero se que Lía piensa lo mismo que yo al estar con Hanna.
-Venga chicos ¿Se van a lanzar a esa alberca o no? - Sonrió con todas las ganas de empaparme.
Me quito la camisa y la lanzo al piso, luego me lanzo a la piscina de Lía, siento el agua fría inundar cada centímetro de mi piel, se que se molestará pero me importa un carajo. Me pongo de pie en la orilla de la alberca y veo la mirada de Jave perdida.
-¿Qué pasa hombre? -
-Estaba por llamarte, tienes que saber algo.- Jave agacha la mirada.
-¿Qué carajo ha pasado? - Comienzo con la intriga, miedo y furia a la vez, salgo de la alberca y tomo la toalla que estaba junto a los pies de Lía.
Cuando Jave y Lía están juntos sin nosotros dos, pasa algo, algo grave.
-He creído ver a Dante en la universidad esta mañana.- Jave entrelaza su cabello en los dedos de las manos.
-¿Que carajo hacía aquí? - Grito.
-Relajate Steve- Lía sonríe calmada.
-Hanna no sabe nada, al parecer solo llego de entrada por salida, no necesitamos que te enojes en este momento.
-El le rompió el corazón de mil formas Lía, no me pidas que me calme- Me siento en la orilla del camastro mientras los veo a ambos mirarse en silencio.
-Escuchen, si ustedes no quieren hacer nada, no lo hagan. Pero yo no me quedaré de brazos cruzados viendo como ese cabrón vuelve a su vida, ustedes se tienen así mismos y ella no tiene a nadie más que a mí. Ese tipo solo la hace sentir insegura.- Me levanto y tomo mi camisa.
Salgo de la casa empapado sin esperar que me pidan regresar, subo a la motocicleta sin mirar atrás ¿Cómo es posible que ese cabrón vuelva después de romper su corazón en mil pedazos, después de pedirle que se desnudara en una fiesta solo por estar ebria. Es un cabrón y es el que más odio.
Llego a mi casa, estoy helado por el aire de la noche, el agua en mi piel ocasiono que la ropa se impregnara a mí, subo a la habitación en silencio y entro en la ducha, disfruto el agua caliente chocando con mi piel. Me relajo lo más que puedo e intento olvidar lo que han dicho esta noche, me hundo en la bañera intentando sacar mis pensamientos, y cambiarlos por su sonrisa... Aquella que me da vida, salgo de la ducha, siento el vapor del agua caliente chocar con mi rostro, esta frío como las paredes de esta casa. Coloco la toalla blanca en mi cadera mientras tomo el teléfono y tecleo un mensaje para Hanna.
¿Hola? Bonita, nos vemos mañana. Te quiero.
Sonrío y me siento en la cama esperando la respuesta de Hanna, quisiera poder decirle un te amo o incluso explicarle que mis te quiero llevan 1000 sentimientos. Me pongo un pantalón de franela para dormir cuando suena el celular. Es ella.
Hola Stevee, te veo mañana, sueña lindo, conmigo si es posible. Te quiero.
Apago el movil, me quedo recostado al centro de la cama viendo fijamente al techo, sin más que solo su rostro en la mente...
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muñeca rota
Misterio / SuspensoLía, Hanna, Steve y Jave, tienen una gran reunión antes de su graduación hasta que aparece Dante el ex novio de Hanna. Una traición, un asesinato y un misterio que tienen que resolver entre las lagunas mentales después de tanto alcohol nadie sabrá q...