Esperanza y Determinación. El Verdadero Amor

C-41

Asami y Misaki llegaron a su habitación, se encerraron dejando a su guardia atrás y a todos, sin importar nada.

No espere que hicieras eso, Misaki —Asami habló con calma, pero en la mirada reflejaba todo el amor y devoción hacia el pequeño Misaki-

La verdad es que, no quiero ser igual que cuando estaba con Akihiko —Misaki se sincero por primera vez en la relación con Asami-

¿Cómo eras con él? —Asami cargo a Misaki, le dio besos en el cuello-

Nunca acepte mis sentimientos por él, siempre era él quien me buscaba, pero no era que no quisiera, más bien, no podía decirle, pero contigo siento diferente —Misaki abrazo con fuerza a Asami y se refugió en él, a cambio recibió besos en el cuello, Asami lo trataba con ternura-

Tu eres mío y yo soy tuyo —Asami lo besó con ternura, habiendo dicho las palabras correctas-

Asami comenzó a desabrochar la ropa de Misaki, lentamente como si tratara de evitar lastimar al ser más amado y preciado, Misaki no se quedó atrás, pues comenzó a desabrochar la camisa de Asami, le quitó la corbata con destreza y lo besó en el cuello, generando mayor contacto con Asami.

—Interrumpió los besos de Asami y lo volteó a ver- Tengo una idea —Sonrió con inocencia, pero sabe que hacer-

—Asami lo vio con duda- ¿Cuál?

Te taparé los ojos con tu corbata —Sonrió con calma y lo besó en la frente, después en la nariz y después en la boca-

Antes que Asami pudiera negarse o preguntar algo, Misaki fue maestro y le vendo los ojos, asegurándose en el acto que Asami no se la pudiera quitar y después lo besó en los labios con pasión, para que Asami no sintiera la necesidad de quitarse la venda

Asami comenzó a relajarse, una vez que Misaki lo besó con pasión, se dejó llevar en el juego de seducción. Asami tomó el control, besando las zonas erógenas de Misaki, atrás de la oreja, en la nuca, en el cuello, en los rosados y lindos pezones de Misaki, después comenzó a cuidar del lindo Misakito, y comenzó a preparar la entrada de Misaki, metió sus dedos a la boca de Misaki para que los humectara, Misaki los recibió gustoso, después comenzó a introducir poco a poco sus dedos, una vez que lo sintió más libre, comenzó a formar una tijera para hacer más campo, una vez introdujo en tercer dedo, los sacó, introdujo su pene y comenzó con embestidas suaves y poco a poco comenzó a tener más fuerza, Misaki gemía eso era música para los oídos de Asami. Ambos siguieron con su acto, estaban encerrados en el cuarto.

Más fuerte Asami —Misaki rogaba por más-

Puedo lastimarte —Asami trataba de ser racional-

Yo puedo, vamos, dale a tu bebé más —Misaki rogaba por más-

Esta bien, pero no quiero escuchar quejas mañana si no puedes caminar

No sabrás nada de dolor

Esta bien

Asami comenzó a dar embestidas más fuertes y rápidas, ambos disfrutaban del momento.

Pasaron la noche, varias rondas realizadas y ahora mismo son las 9:30am, ambos están abrazados. Esperando que hoy sea un gran día.