Segunda parte

8 1 0
                                    

...

-Tú no sabes nada.

Me fui en busca de Roxana, la vi y la abracé le conté lo que había pasado, y me sentía culpable porque sentí que el grupo se había separado por mi culpa de cierta forma.

-¡No te preocupes Sofi! Ellas no entienden, pero no estás sola. Juntas a la perfección ¿Qué no? 

-¡Quiero que me enseñes a ser como tu Roxy! Lo necesito.

-Me alegra oír eso, te pasaré unas páginas esta tarde y verás que a partir de aquí no me necesitarás más.

Regresamos al salón tomamos nuestras mochilas y nos cambiamos a otro lugar, lejos de Elena, Luisa y Sabrina. 

Poco a poco fui limitándome más y ejercitándome al extremo, las 100 abdominales se convirtieron en 200, ya no consumía 1000 calorías, consumía 800 al día, los entrenamientos eran extenuantes, casi no dormía, pero cada día me sentía un poco más triste, porque pensaba que no perdía nada en lo absoluto, los días en la escuela se me hacían largos, y las pláticas con Roxana eran cada vez más fuertes, pero esa noche no aguanté, baje rápidamente a la cocina en medio de la noche, abrí el refrigerador y encontré una rebana de pastel cubierta con una servilleta, así que lo tomé y me lo comí con tantas ansias, regresé a mi cuarto, pero en vez de sentirme satisfecha sentía un sentimiento de culpa, encontré una botella de agua dentro de mi mochila y me la tomé demasiado rápido pero en vez de ayudar empeoró las cosas, me metí dentro de mi cama, y sólo daba vueltas y vueltas, hasta que lo decidí me levante abrí la puerta del baño y me incliné sobre ella mis dedos tocaron mi garganta y fue como si mi estómago lo empujara. 

¿Qué diablos estás haciendo Sofía?- pensé, bajé la llave del baño, y me senté en mi cama, la sensación de vacío me daba un tipo de placer, me abracé las rodillas y comencé a llorar hasta quedarme dormida. 

Cuando llegué a la escuela al día siguiente busqué a Roxana, y le conté lo que me había pasado esta madrugada, ella me dijo que era normal, que si ya sabía cómo no dejara de hacerlo que bajaría mucho más rápido. 

Al transcurso de un mes regresé con ella al centro comercial nuevamente a pesarme, y me asombré con el resultado:

165.5671 libras = 75.100 Kilogramos. 
Su índice de Masa Corporal es 28.23 Kg/m2
Usted sufre de sobre peso.

Ya no era obesidad, ya no me decía que era gorda, y pensar que yo sola lo había logrado, entonces fue que Roxana me dijo: 

-Ya no me necesitas, a partir de hoy ya podrás sola, no quería decírtelo antes de que llegáramos pero mis padres me cambiaron de escuela, se que podrás seguir sin mí, pero pues sabes donde localizarme por si necesitas algo.

La abracé llorando, no quería que se fuera sentí por un momento que le debía mucho y al despedirse de mí me vio de una forma verdaderamente especial. 

Salió del centro comercial y dobló a la derecha y yo a la izquierda, algo me animó a voltearla a ver y sentí una sensación extraña pensaba que todo estaría bien, pero apenas a empezaba a enfrentarme a lo que sería mi verdadero infierno.

FragilDonde viven las historias. Descúbrelo ahora