ᴇʟ ᴏᴛʀᴏ ᴊᴏɴɢʜᴏ ;; 2ho

Capítulo 13 ;; ¡Click!

Yunho miró a Jongho, quien aún tomaba su desayuno con toda la tranquilidad del mundo. ¿Realmente ese chico le había dicho aquello?

Yunho sabía a ciencia cierta que eso había ocurrido, pero no quería terminar de creérselo. Después de todo, aquel chico había estado borracho la noche pasada.

Cuando terminaron de desayunar, Jongho fue al baño a lavarse la cara y Yunho de quedó recogiendo la vajilla.

Recibió una llamada.

—Yunho, ¿estáis ahí? —era YangYang.

—¡YangYang! Sí, estamos en mi casa aún. Jongho está en el baño.

—¿Qué tal ayer? ¿No te hizo anda raro no? —cuestionó YangYang entre risas.

Yunho dudó— No...no ocurrió nada raro. Él está sobrio ahora, así que supongo que lo llevaré a su casa. ¿Como están Jaesang y Jihu?

—Bastante bien en realidad, no sabía que roncaban tanto.

Yunho rió— Bueno, te dejo. Qué estoy aquí recogiendo la vajilla.

—Uy, que responsable —se bufó YangYang— ¿Ya estás entrenando para ser esposa?

—Cierra el puto pico —Yunho colgó.

A veces tenía ganas de aplastar la cabeza a ese chico. ¿Por qué todos eran tan entrometidos?

Jongho regresó del lavabo, una somñoliento.

—¿Vas a decirme dónde está mi ropa? —Yunho no se dio cuenta hasta ese momento que el menor aún no llevaba puesta la camiseta o las zapatillas.

Corriendo subía a su habitación y allí buscó la ropa que había guardado de Jongho, sin embargo emitía un fuerte y desgradable olor a alcohol.

—Uff, que asco —Jongho, quien lo había seguido hasta arriba, habló —Nl voy a ponerme eso. ¿Puedes lavarlo?

—Claro, ¿pero que te vas a poner? —cuestionó el más alto, mirando de arriba a abajo al contrario —¿Quieres que vaya a tu casa a por ropa?

—Mi casa está lejos —negó Jongho—. Prestame alguna camiseta tuya, seguramente me quedé bien.

Yunho no tuvo tiempo para reclamar cuando vio a Jongho ya rebuscando en sus cajones.

—Esa es la ropa interior —se quejó el mayor avergonzado.

Jongho sacó unos boxers— ¿Me los dejas? —pero al ver la expresión entre sorpresa y vergüenza de Yunho lo volvió a dejar donde estaban— Solo bromeo.

Finalmente llegó al cajón de las camisetas y agarró una azul que no parecía muy llamativa.

—¿Puedo ponerme esta?

—Claro, pero espera a que te quede bien.

Jongho se la puso, y como era de esperar le quedaba algo grande, pero no pareció un problema para él. Por el contrario, olió la camiseta.

—Anda, si huele igual que tú.

Yunho sintió un escalofrío recorrerme la espalada, y su cara se empezó a calentar. La noche anterior había ocurrido algo parecido.

"Yunho, hueles bien..."

Yunho negó con al cabeza, obligándose a volver al presente, donde se encontró cara a cara con Jongho, que lo miraba con los ojos muy abiertos y una mueca de desconcierto. Parecía adorable.

—¿Estás bien? Pensé que te estaba dando un ataque —Jongho se alejó más calmado de él—. Si tanto te afecta que time tu camiseta, siempre puedo ir con el torso desnudo por la calle, si así lo quieres.